laguardia. La población de perdiz roja autóctona tiene muy buenos niveles en Álava, si bien es cierto que la introducción o repoblación con híbridos ha ocasionado ya alteraciones genéticas en estas aves, que se aprecian en casi todos los cotos del territorio, según un estudio encargado por el Departamento de Agricultura de la Diputación Foral de Álava a la Universidad de Zaragoza.
Este estudio fue elaborado por la profesora María Victoria Arruga Laviña, directora del Laboratorio de Citogenética y Genética Molecular de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Zaragoza, y en él se concluía que había un porcentaje del 14,29% de hibridación en las perdices rojas alavesas (alectoris rufa).
Esta situación llevó al Departamento foral de Agricultura a redactar un borrador de decreto con el que se pretende regular el protocolo a seguir a la hora de efectuar repoblaciones tanto en los cotos de caza como en las zonas de caza industrial y también en las granjas cinegéticas.
El trabajo realizado se llevó a cabo en el campo, en los cotos, con la recogida y análisis de plumas de perdices. Fruto de esta labor se pudo observar, entre otras cosas, que en el coto de la localidad alavesa de Laguardia, donde se analizaron 19 perdices, el porcentaje de hibridación con la especie chukar es del 5,26%, mientras que en el coto de Oion, el porcentaje subía hasta el 14,28%.
Por esta razón, señala el estudio, es urgente y absolutamente necesario el análisis genético y el control de todo lo que se suelte en el medio natural. Ya no es sólo necesario el control de lo que se produce en cautividad, sino que los controles en las sueltas son imprescindibles y necesarios antes de que se sobresature el medio natural con perdices híbridas, no controladas o que se supongan pertenecientes a la especie perdiz roja, sin haberse comprobado con anterioridad a la suelta.