vitoria. Una de las principales preocupaciones de la Dirección de Drogodependencias del Gobierno Vasco, en lo que a tendencias en los consumos se refiere, es la temprana iniciación de los jóvenes en el uso del cannabis. Los pediatras se encuentran en la consulta con chavales que fuman porros desde los 13 o 14 años, una edad en la que al cerebro le faltan aún siete años para completar su desarrollo.
"Es preocupante que la sociedad perciba que el consumo de cannabis no tiene importancia", señaló la directora de Drogodependencias, Celina Pereda, convocada por el PNV ante la Comisión de Políticas Sociales, Trabajo e Igualdad de la Cámara Vasca. Actualmente, la edad media de inicio en el mundo de los porros es de 19 años, dos años después de empezar a fumar y beber. A los 19,9 se sitúa el comienzo del consumo de speed, mientras que la cocaína se empieza a tomar dos años después.
En Euskadi, más de 60.000 personas fuman hachís o marihuana, y quienes lo hacen de forma experimental tienen muchas más posibilidades de convertirse en usuarios crónicos que quien prueba el speed o la cocaína. Así, un 18% de quienes han fumado cannabis por probar ha terminado haciéndolo de forma habitual. En el caso de la cocaína y la anfetamina en polvo, un 3% de los consumidores ocasionales de la Comunidad Autónoma Vasca acaba enganchado a estas sustancias.
Pereda indicó, con respecto al peligro de habituarse a los consumos, que el efecto adictivo del tabaco es muy rápido, más que en el cannabis o la cocaína, lo que causa una falsa sensación de control de los usuarios con respecto a estas últimas sustancias.