l cambio de hábitos sociales y la pandemia han afectado de lleno al comercio vitoriano, pero el sector “es un ejemplo de resistencia y tiene profesionalidad de sobra para salir adelante”. La primera teniente de alcalde y concejala de Promoción Económica del Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz, Maider Etxebarria, tiene muy claro que el comercio de la capital alavesa “necesita más que nunca” del apoyo de las instituciones para adaptarse a la situación actual, por lo que subraya que “seguiremos trabajando de forma coordinada para crear nuevas estrategias que impulsen su reactivación. Sin olvidar, por supuesto, las ayudas institucionales y la concienciación ciudadana acerca de la importancia de apoyar al comercio de proximidad”.

Etxebarria, que aprovecha cualquier hueco en su agenda para visitar negocios de Vitoria en los que pulsar las opiniones de los profesionales, echa la vista atrás unos meses para recordar las semanas en las que la ciudad se llenó de persianas cerradas. “Echamos mucho en falta a nuestros comercios durante el confinamiento. Tiendas, bares y restaurantes obligados a echar la persiana por culpa de la crisis sanitaria. Por eso desde el Ayuntamiento no nos cansamos de animar a la ciudadanía a recuperar el placer de comprar de la mano de profesionales que nos brindan un trato cercano”.

La concejala agrega que “debemos estar orgullosos de nuestro comercio, porque en un momento clave está demostrando que sabe apretar los dientes, que quiere explotar sus fortalezas y que está dispuesto a afrontar su necesaria reestructuración”. Quedarse de brazos cruzados no es una opción. “Ya no es suficiente con la tienda física, también hay que asumir la transformación digital y buscar otras fórmulas para acercarse a la clientela”, dice.

Etxebarria recuerda que el Departamento de Promoción Económica ha puesto en marcha una ambiciosa batería de medidas para apoyar al sector tras escuchar “de primera mano” sus sugerencias. Entre las acciones está la puesta en marcha en mayo del Plan de Reactivación Económica, dotado con 2,7 millones de euros, para ayudar a las empresas locales, a los autónomos, al comercio y la hostelería. Un plan que, por ejemplo, incluía nuevas ayudas para la compra de material de protección contra el coronavirus y para impulsar la digitalización. Estas últimas ayudas, las de transformación digital, se han activado para costear inversiones en equipamiento y software informático relacionado con el teletrabajo, la adaptación o desarrollo de web corporativo o la introducción del comercio online. “Este es el camino y vamos a seguir en esta línea”, adelanta.

BONOS DE COMERCIO Y TURISMO

La edil también destaca que la colaboración interinstitucional también ha servido para poner en marcha los bonos de comercio y turismo, “que hemos puesto en marcha junto al Gobierno vasco y el resto de diputaciones y ayuntamientos vascos” y que inyectarán casi 9 millones de euros en el mercado de Euskadi para revitalizar el consumo.

Etxebarria asegura que la colaboración institucional y la público-privada son esenciales en este momento, pero cree que existe un tercer factor tan determinante como los dos anteriores: la complicidad ciudadana. “No podemos obligar a nadie a consumir en un lugar determinado, pero sí podemos recordar una y otra vez que las personas consumidoras deben reflexionar antes de darle al ‘click’ en el móvil o el ordenador. En definitiva, que comprar en las grandes plataformas internacionales tiene consecuencias negativas muy cerca, en la tienda que está debajo de casa. Hay miles de familias vitorianas y alavesas que dependen de nosotros y que luchan cada día por renovarse, adaptarse a nuestros gustos y levantar la persiana. Por eso, lo mejor es consumir local”.