El portavoz del PSOE, Felipe Sicilia, ha rechazado hoy la propuesta del alcalde de Valladolid, Oscar Puente, de que el PSOE facilite la investidura de Alfonso Fernández Mañueco como presidente de Castilla y León con el fin de que evitar que Vox entre en el Gobierno regional y ha justificado su posición en que no van a ayudar a un partido que tiene una agenda en los tribunales a partir de abril por casos de presunta corrupción.

Óscar Puente ha afirmado esta mañana que los socialistas tienen que "ofrecer esa alternativa" para que el PP "no caiga en brazos" de Vox y por "coherencia" de su propio partido. Según ha apuntado, el PSOE no puede hacer un discurso sobre la "peligrosidad" de la formación de Santiago Abascal y, luego, permitir que entren en el Gobierno.

Sin embargo, Felipe Sicilia, ha dejado claro que, aunque no tienen problema en sentarse a hablar con el PP, tampoco van a facilitar el Gobierno de un partido que, ha señalado, tiene una agenda con los tribunales a partir del mes de abril.

Además, ha alegado que el "escenario que hoy se plantea" no lo ha propiciado el PSOE, sino que es el que ha planteado el PP por el adelanto electoral con el único objetivo de "reforzar a Casado y tratar de trasladar la idea de que hay un cambio de tendencia que no existe".

En este sentido, ha recalcado que ha sido el PP quien ha querido correr el riesgo de que pudiera entrar la extrema derecha en el Ejecutivo regional y ahora "son responsables de hacer lo que hicieron".

Según Sicilia, los dirigentes populares no han hecho "ningún tipo de ascos" a Vox afirmando que dialogarían y pactarían con él, "blanqueando" a la extrema derecha para hacer gobiernos con ellos.

Por lo tanto, ha insistido, la posición del PSOE y de su Ejecutiva "es clara en esta situación". En este sentido, ha señalado que "la pregunta a cerca de un apoyo al PP ya la ha respondido el PP, que ha dicho que no tiene problema en hablar y llegar a acuerdos con Vox, lo han dicho estos días muchos dirigentes del PP". Y ha añadido que, como esto lo han sabido entender los dirigentes de Vox, ya exigieron ayer entrar en el Gobierno regional.

Vox quiere formar parte del Ejecutivo

Por su parte, el candidato de Vox a la Presidencia de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, ha insistido este lunes en exigir formar parte del Gobierno de la Junta de Castilla y León que surja tras las elecciones de este domingo y ha garantizado que no facilitará un gobierno en solitario del PP ni se prestará a ser "muleta de nadie".

En rueda de prensa este lunes, García-Gallardo ha confirmado que Vox exigirá entrar en el próximo Ejecutivo regional para apoyar al PP. Y ha descartado la posibilidad de abstenerse para evitar la repetición de elecciones. "Lo dijimos claro, si alguien quería que el PP gobernara en solitario que hubieran votado al PP, no voy a regalar los votos a nadie", ha garantizado.

"Tengo que decir de manera rotunda que el resultado de las elecciones nos da el derecho y el deber de integrar el próximo Gobierno de Castilla y León, no es una sorpresa, hemos venido a dar cambio de rumbo, esto es un punto de inflexión", ha enfatizado García-Gallardo insistiendo en el mensaje que ya lanzó este domingo el líder de Vox, Santiago Abascal, tras conocer los resultados.

Ahora, ha defendido que las negociaciones deben quedar en el ámbito de Castilla y León y ha asegurado que él mismo dirigirá las conversaciones por parte de Vox. "Espero que en Castilla y León nos entendamos, voy a dirigir las negociaciones con Fernández Mañueco yo personalmente, creo que es lo razonable", ha zanjado, al tiempo que ha avisado de que no tiene nada que hablar con el secretario general del PP, Teodoro García Egea, porque no ha sido el candidato en la comunidad.

En este sentido, García-Gallardo ha afirmado que por el momento no ha recibido la llamada del candidato del PP, Alfonso Fernández Mañueco, para abrir esa negociación. "Parece que primero iba a llamar al PSOE, tampoco nos sorprende", ha señalado entre los aplausos de los simpatizantes de Vox que han asistido a esta comparecencia ante los medios de comunicación.

Además, ha evitado citar qué consejerías le gustaría gestionar, aunque sí ha defendido que Vox tendría que contar con al menos la misma representación que tuvo Ciudadanos tras las elecciones de 2019, cuando entró a formar parte del Gobierno con varias consejerías y la vicepresidencia habiendo obtenido 13 procuradores, frente a los 14 de Vox este domingo.

No obstante, ha insistido en que antes de hablar de sillones es necesario referirse a las políticas y ha defendido la necesidad de derogar "políticas de izquierdas" como, a su juicio, son la Ley de Violencia de Género o el Decreto de Memoria Histórica.

García-Gallardo ha garantizado que desde la formación que representa se negociará con "responsabilidad, prudencia, firmeza y flexibilidad" desde la consciencia de que tendrán que ceder en algo dada su representación. No obstante, ha insistido en que Vox "no es más ni menos que nadie".

"Si otros partidos con una menor representación han integrado el Gobierno nosotros vamos a hacer valer nuestros votos, un votante de Vox no vale menos que el de otro partido se llame como se llame", ha defendido.

"Si no se conforma un Gobierno para cambiar el rumbo de Castilla y León que no cuenten con Vox", ha insistido, tras lo que ha agradecido a Fernández Mañueco esta convocatoria electoral para que se refleje en el Parlamento regional la "realidad" actual de la sociedad.

En cuanto a las políticas, ha detallado que entre sus objetivos está la bajada de impuestos, impulsar la natalidad, políticas de campo e industria, además de hablar de la Agenda España y sus diez principios rectores y dar voz a la España silenciada.

Sobre este último punto ha asegurado que Vox se pondrá en contacto con las plataformas ciudadanas que defienden políticas contra la despoblación y que no han logrado representación en el Parlamento como 'España vaciada' para darles voz desde su defensa del papel de la provincia "en toda su diversidad". En este sentido ha repetido sus críticas al Estado de las Autonomías, un modelo, a su juicio, "fracasado".

"TEZANOS DE IZQUIERDAS Y DE DERECHAS"

Por último, García-Gallardo ha agradecido el respaldo del partido y la implicación en la campaña de la Comunidad, al tiempo que ha aprovechado también para alabar el respaldo de los votantes de Vox. "Gracias por su confianza a pesar de la demonización de algunos medios y de la influencia de los Tezanos de izquierdas y derecha que han tratado de influir desde el principio", ha señalado.

"Teníamos datos que decían lo contrario, ha habido encuestas que decían que el Partido Popular iba a obtener una mayoría absoluta de la que nunca ha estado cerca, incluso al final de la campaña han querido sembrar el miedo con la posibilidad de un gobierno del PSOE que luego el resultado lo que ha dado está muy lejos de ser realidad", ha lamentado, ante lo que ha añadido: "Quiero hacer un énfasis especial en que esto es un gran problema para la democracia hay que decir a estos Tezanos de izquierdas y Tezanos derechas que no puede seguir esto así porque ser pervierte la democracia".