MADRID - La no aprobación de los Presupuestos del Estado el año pasado llevó a Pedro Sánchez a disolver las Cortes y convocar elecciones el 28 de abril. Tras la investidura fallida y la reválida que supusieron los comicios del 10-N, y ya con un Gobierno de coalición de PSOE y Unidas Podemos, el gabinete Sánchez se enfrenta de nuevo a la aprobación de las Cuentas, lo que tendrá mañana su primera prueba de fuego con la votación de la senda de déficit y el techo de gasto, paso previo imprescindible para superar el proyecto presupuestario del exministro Montoro, aún en vigor.

En esta tesitura, el PNV avanzó ayer que votará a favor de las previsiones del Ejecutivo, lo que, pese a no ser suficiente, allana el camino a las Cuentas de este año. El Gobierno español está en minoría y necesita de múltiples apoyos para sacar adelante sus iniciativas, como se demostró en la propia sesión de investidura de Sánchez. Fue el portavoz del Grupo Vasco, Aitor Esteban, quien adelantó el sentido del voto jeltzale en el pleno del Congreso de mañana. Agregó que, a más tardar dentro de dos semanas, como se acordó, se reunirá la Comisión Mixta del Concierto en la que se hablará de cuestiones presupuestarias y de otros asuntos que forman parte del acuerdo entre PSOE y PNV.

La nueva senda de déficit aprobada por el Ejecutivo contempla un desfase del 1,8% del PIB para este año, lo que supone una flexibilización de 1,3 puntos respecto al 0,5% todavía vigente aprobado en 2017. Este índice deberá reducirse además al 1,5% en 2021 y al 1,2% en 2020. Por su parte, el límite de gasto no financiero para 2020, conocido como techo de gasto, ascenderá a 127.609 millones de euros.

De cara al pleno de mañana, PSOE y Unidas Podemos miran también a los 13 diputados de ERC, toda vez que PP, Ciudadanos y Vox se posicionarán en contra. Pero la celebración hoy de la primera reunión de la mesa de diálogo de Catalunya marcará sin duda el sentido del voto del partido republicano. Tampoco EH Bildu ha decidido aún el sentido de su voto. Su portavoz en la Cámara baja, Mertxe Aizpurua, recordó que su formación siempre ha defendido la autonomía municipal para que los consistorios que no tienen déficit ni deuda puedan utilizar sus fondos como crean oportuno. En este contexto, la mayoría del Congreso aprobó ayer cambiar la Ley de Estabilidad para levantar el posible veto del Senado a la senda de déficit y de deuda.