madrid - La vicepresidenta del Gobierno en funciones, Carmen Calvo, señaló ayer, tras la exhumación de los restos de Francisco Franco la pasada semana, que José Antonio Primo de Rivera puede seguir enterrado en el Valle de los Caídos de “manera discreta”. “Es una víctima y podrá estar en este lugar de alguna manera, obviamente discreta”, matizó Calvo, apuntando que puede ser “en otra ubicación”. La tumba de Primo de Rivera se encuentra delante del altar mayor de la basílica del Valle de los Caídos, mientras que la de Franco se hallaba ubicada detrás del mismo altar.

Calvo incidió que el fundador de La Falange, fusilado en 1936, es una de los 33.000 víctimas en la guerra que se encuentra en el Valle de los Caídos. El informe que elaboraron los expertos que integraban la comisión sobre el futuro del Valle, por encargo del entonces presidente del Gobierno Zapatero, ya apuntaba la conveniencia de que nadie estuviese enterrado en un lugar preeminente. Pero en ningún momento se planteó la salida de Primo de Rivera del Valle al considerarlo una víctima de la Guerra Civil. - E.P.