Vigo - Pedro Sánchez aseguró ayer que el PSOE no pide “el apoyo de Ciudadanos”, un partido “que pacta con la ultraderecha”, sino que lo que pide es que “no bloquee” la conformación de un gobierno. Así lo manifestó en un mitin de precampaña en Vigo, en el que ironizó con el hecho de que Albert Rivera haya “levantado el castigo” al PSOE. “Si nos portamos bien”, añadió.

Según subrayó, Rivera afirma ahora estar dispuesto a gobernar con el PSOE, pero “si suma más con PP y con la ultraderecha quiere echar al PSOE, y mientras tanto, gobierna con el PP y la ultraderecha en comunidades y ayuntamientos”. “Todo un ejemplo de coherencia, señor Rivera”, apostilló. Sánchez también tuvo mensajes para Unidas Podemos y para el PP y, así, sobre Pablo Iglesias, afirmó que “vuelve a sacar el trampantojo de la gran coalición del PSOE y el PP, entre PSOE y Ciudadanos, eso sí, le dura hasta el día de las elecciones”. “Al día siguiente ya sabemos que el señor Iglesias con sus votos lo que hace, cuatro veces en cuatro años, eso sí tiene mérito, es impedir que haya un gobierno del PSOE en España”, sentenció.

Por otra parte, se preguntó “dónde está el PP”, si está “en hibernación”, y “solamente aparece” cuando, por ejemplo, se escucha a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, “decir cosas ultraderechistas porque pacta con la ultraderecha”.

El líder del PSOE defendió que solo su partido puede “garantizar” un gobierno estable, porque lo que hay “a izquierda y derecha” es “una sopa de siglas, que lo que quieren es seguir bloqueando el país”. Por tanto, añadió, el próximo 10 de noviembre, hay que elegir entre “un gobierno, o seguir instalados en el bloqueo”. En ese sentido, llamó a la movilización y a “no dar por hechas las cosas”. “Basta ya de lamentos por lo que pudo ser y no fue, basta de reproches a aquellos que malograron lo que los ciudadanos votaron de manera mayoritaria. No hay que mirar ni a izquierda ni a derecha, ni para atrás, sino cara a cara a la gente”, proclamó Sánchez, que insistió en que los socialistas no cuestionan el multipartidismo, porque son los ciudadanos los que construyen, con su voto, el escenario postelectoral, y repetió que “cualquier opción es buena, y legítima, lo único que no es legítimo es el bloqueo político”. - E.P.