donostia - Las placas que recuerdan al expresidente de la Diputación de Gipuzkoa Juan María Araluce, su conductor José María Elicegui y los tres policías escolta Antonio Palomo, Alfredo García González y Luis Francisco Sanz, asesinados por ETA en 1976, aparecieron el pasado viernes, como ya ocurriera el 9 de agosto, tapadas con pintura negra. El alcalde de Donostia, Eneko Goia, condenó en Twitter este sabotaje y calificó de “indignante que se sigan produciendo ataques al reconocimiento a las víctimas del terrorismo”.

Maite Araluce, hija de Juan María Araluce, aseguró que “no habrá pintura que ensucie la memoria” de su padre, ya que “su memoria y la de todas las víctimas del terrorismo siempre se mantendrán vivas”. El portavoz municipal del PSE, Ernesto Gasco, consideró a su vez “necesario el respeto a la memoria”. El Ayuntamiento donostiarra desplazó de inmediato una brigada de limpieza para borrar la pintura de las placas. - DNA