Donostia - La restricciones que acarrea una cumbre como la del G-7 en Biarritz no se limitan solo a la ciudad imperial. Uno de los puntos de atención de estos próximos días será la gestión del tráfico, sobre todo en lo que se refiere a las carreteras vascas en un fin de semana que es el central en la Operación Retorno y también el de Paso del Estrecho, con miles de personas que regresan de países magrebíes hacia distintos países de la UE.
La Ertzaintza, que tiene capacidad plena en la CAV descontada la competencia del control de la frontera -en manos de la Policía Nacional y la Guardia Civil-, tiene preparados distintos planes de tráfico, seguridad ciudadana y protección civil según cuáles sean los escenarios que se vayan desarrollando a lo largo de los días de la contracumbre y de la cumbre.
La Policía vasca tiene la atención puesta sobre todo en el tráfico, ya que Biarritz acogerá el G-7 el fin de semana del año que más tránsitos registra Biriatu. El año pasado cruzaron el paso fronterizo entre ambos estados del orden de 30.000 vehículos al día en este último fin de semana de agosto, el último vacacional para muchos.
Tanto desde la mesa de seguimiento que la Ertzaintza situará en Oiartzun para monitorizar las posibles afecciones del G-7, como desde el centro de control de tráfico en Txurdinaga (donde se recibe la señal de las casi 180 cámaras que vigilan la red viaria vasca), la Ertzaintza no va a quitar ojo a lo que suceda en las principales vías de circulación de la CAV.
Ante los diferentes escenarios que se pueden dar al norte del río Bidasoa, desde los más fluidos hasta los más convulsos, el Departamento de Seguridad trabaja sobre distintas posibilidades, pero en todas ellas la recomendación es la misma: evitar en la medida de lo posible desplazarse a Iparralde, sobre todo en el caso de aquellos que planeaban pasar el fin de semana en destinos habituales como Las Landas.
El hecho de que dos de los tres días de la cumbre sean en fin de semana puede aliviar en cierta medida unos atascos que se antojan inevitables, pero aun así habrá afectados que deban cruzar el río porque trabajan en fin de semana.
En cuanto a la seguridad, la Er-tzaintza recuerda que la cumbre se celebra en Biarritz, con lo que los principales quebraderos de cabeza para evitar cualquier tipo de incidente se ciernen sobre esa zona. Por esta razón, el nivel antiterrorista se mantiene en el nivel 4 y como ocurre en cualquier evento masivo del verano guipuzcoano, la Policía vasca tomará las medidas correspondientes. - J. Arretxe