madrid - Oskar Matute criticó la falta de “empatía y fraternidad” entre la izquierda y defendió su abstención ayer en el pleno de investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno español para evitar un gobierno de derecha, por lo que aseguró que sus votos son “un compromiso antifascista”.
Tras lamentar que Sánchez haya centrado las negociaciones y su discurso de las últimas sesiones en los “vetos” y la “presión” al resto de formaciones políticas, el diputado de EH Bildu expresó su preocupación “por la homologación y normalización” que, a su juicio, se está dando “a la extrema derecha en el Estado español” y porque se les esté dando “capacidad de veto y de presión al resto de formaciones políticas”. Según señaló, “solo así se entiende el miedo a negociar con EH Bildu en algunos territorios”.
Tras recordarle a Pedro Sánchez que los cuatro votos de la coalición abertzale eran uno más de los tres que necesitaba para “salvar la investidura”, de haber llegado a un pacto con Podemos, Matute le aclaró que los apoyos de EH Bildu no eran para que fuera presidente, sino que eran votos para evitar que Pablo Casado, Albert Rivera o Santiago Abascal llegarán a la Moncloa.
En este punto recordó los resultados de las elecciones generales del pasado 28 de abril para evidenciar el escaso respaldo de los partidos de Casado, Rivera y Abascal en Euskadi. “Nos debemos a nuestro pueblo y nuestro pueblo una parte importante de él, el que se ubica en la Comunidad Autónoma Vasca, les premió a ustedes, a los señores del PP, de Ciudadanos y de Vox con cero diputados. Eso es lo que merecen y es al pueblo al que nos debemos”, apostilló. - DNA