Pamplona - En otro intento de que la gobernabilidad de Navarra se decida en Madrid, UPN y sus socios de Navarra Suma (PP y Ciudadanos) escenificaron ayer en el Congreso la firma de una carta bajo el título Declaración por la dignidad de las instituciones navarras y españolas. La rúbrica se puso en escena por separado: con el líder del PP, Pablo Casado, y con el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera. Javier Esparza se reunió con ambos para recordar que sus dos diputados en el Congreso (UPN) siguen dispuestos a abstenerse en la investidura de Pedro Sánchez si a cambio impide que los socialistas navarros presidan el Gobierno foral pactando con Geroa Bai, Podemos e I-E.

Ciudadanos no quiso sumarse a la firma de la declaración realizada por PP y UPN, y la hizo por separado con el partido regionalista. Es más, en un acto solo con la prensa, Rivera negó la mayor e insistió en que la coalición Navarra Suma, que ganó las elecciones en la comunidad foral, está formada, en su caso por Ciudadanos y UPN, ya que argumenta que su partido “no ha firmado nada con el PP”. Tanto Esparza como Casado restaron importancia a esta distancia en el seno de la coalición, aunque el líder popular acabó por reprochar a Ciudadanos: “Esto no era la nueva política, para eso me quedo con la de siempre”.

En la declaración los tres partidos insisten en que, aunque los socialistas lo nieguen, si la secretaria general del PSN, María Chivite, quiere ser la próxima presidenta foral, tendrá que “negociar” de forma “pública” o “privada” la abstención de EH Bildu, porque “los amigos de los terroristas” no facilitarán “gratis” su investidura.

Los tres socios electorales sostienen en su texto que si se produce ese acuerdo será con el visto bueno de Sánchez y de Arnaldo Otegi y que sería “un pacto inmoral” porque no se puede tener a quienes no han condenado el terrorismo como interlocutores políticos. Y llegan a asegurar que si se permite ese acuerdo “habrá ganadores y perdedores”. Afirmación que la derecha valora en su escrito con titulares para la caverna mediática: “Ganarán los líderes del PSN-PSOE y sus ansias de poder a cualquier precio”; “Ganará el nacionalismo vasco, cuyo objetivo es que Navarra desaparezca para anexionarla a Euskadi y crear la llamada república vasca”; y “ganará EH Bildu, del que dependerán la gobernabilidad y el futuro de Navarra”.

uso de las víctimas PP, Ciudadanos y UPN utilizan de nuevo a las víctimas, de quienes dicen serán las que “pierdan” junto la “decencia democrática y España”. Y remarcan que Sánchez todavía está “a tiempo” de impedir un pacto en Navarra “que satisfaga a Otegi y condene a la indignidad al socialismo español”. Y que si no lo frena tendrá un comportamiento “impropio de un presidente del Gobierno que le incapacita para poder representar al conjunto de los españoles”, obviando así la derecha la pluralidad política del Estado.