barcelona - Quim Torra pidió ayer una mediación internacional para solucionar el conflicto político en Catalunya, en su declaración institucional con motivo de la Diada de Sant Jordi, que este año estuvo marcada por el juicio del procés y la campaña de las elecciones del 28-A. En su tradicional discurso del 23 de abril, en el que combinó el catalán y el inglés, el president denunció que esta es la segunda Diada de Sant Jordi con “presos políticos y exiliados” como consecuencia de la “represión” del Estado. Con una “senyera” y una estatua de Sant Jordi decorada con rosas amarillas, llamó a “renovar la lucha por el retorno y la victoria de la libertad”.
Torra reclamó a la comunidad internacional que medie en el conflicto, en unos “tiempos difíciles”, con exconsellers del Govern en “la cárcel o en el exilio por la represión del Reino de España”. “Pedimos otra vez a Europa y a la comunidad internacional que se involucre para resolver este conflicto de una forma democrática; no se pueden tolerar juicios políticos, una democracia no puede tolerar que se silencie la voz de la gente con amenazas y violencia”, argumentó.
Una de las primeras en responderle fue la ministra y número uno del PSC por Barcelona en las generales, Meritxell Batet, para quien el conflicto catalán es “una crisis interna” y le pidio “valentía” para “buscar acuerdos dentro del marco constitucional y estatutario”. Para Inés Arrimadas (Ciudadanos), los independentistas “son muy pesados hasta en Sant Jordi”. Cayetana Álvarez de Toledo (PP), siempre polémica en sus aseveraciones, comparó al nacionalismo con “la peste”. - E. P.