las palmas - El líder del PP y candidato a la presidencia del Gobierno español, Pablo Casado, abogó ayer por regresar a la Ley sanitaria que Ana Mato puso en marcha en 2012 cuando era ministra, y por la que se daba asistencia a los extranjeros irregulares solo a través de urgencias, en casos de embarazo y a menores de edad. Durante un acto en el muelle de Cambulloneros, en Las Palmas, denunció que con Pedro Sánchez en el Gobierno se ha incrementado en un 170% la llegada de inmigrantes irregulares a España, lo que atribuyó al “efecto llamada” de lo que es un “papeles para todos” tras la acogida del barco Aquarius.
Esta es la “peor oleada” de inmigración ilegal desde la crisis de los cayucos en Canarias, cuando era presidente José Luis Rodríguez Zapatero, opinó Casado, quien agregó que esta llegada masiva pone en peligro los servicios sociales y el Estado del bienestar. Durante su visita electoral a Canarias, reiteró su propuesta de un Plan Marshall para África, que anunció este verano, y en las críticas contra las políticas de Moncloa que cree que se basan en una “apelación demagógica y buenista” que es utilizada por las mafias de tráfico de personas para “delinquir”.
“No es cuestión de alarmar”, dijo, pero aseguró que España está ante una “oleada” de llegadas, según las cifras de la Organización Mundial de las Migraciones que coinciden con los datos de la Comisión Europea. Por eso, defendió que el PP apuesta por una inmigración como la que ha funcionado durante sus años de Gobierno y que ahora cree que está en riesgo por la “demagogia” del PSOE. Concluyó que “la solidaridad es compatible con la firmeza en la fronteras”.
Planteó asimismo como una medida concreta recuperar la Ley sanitaria que en 2012 puso en marcha Ana Mato y que el Gobierno de Pedro Sánchez revirtió siendo ministra de Sanidad Carmen Montón. “Queremos que se ponga en práctica la ley de racionalización del sistema sanitario de 2012 que acababa con el turismo sanitario y ahorraba mil millones de euros” en este ámbito, subrayó. Recordó que dicha norma permitía la asistencia a extranjeros en casos concretos como urgencias, por “enfermedades infecciosas y en maternidad”. Gracias a ella, según él, se evitaba poner en riesgo la sanidad universal y gratuíta.
Gestión de prisiones Por otro lado, Pablo Casado afirmó también en Tenerife que si gana las elecciones la gestión de las prisiones será estatal porque, aseveró, no quiere cárceles “a la carta” para los independentistas “y ahora, para los etarras”. Afirmó que al PSOE le gusta transferir personal y competencias a Catalunya para que en las cárceles los presos independentistas estén “a cuerpo de rey”. Mientras, prosiguió, no se dan fondos para mejorar la situación de los funcionarios de prisiones en el resto del Estado. - Efe
