madrid - Los grupos parlamentarios del Congreso coincidieron ayer en la necesidad de que la reforma de la Ley de Seguridad Ciudadana, conocida como ley mordaza, regule de forma más precisa cómo deben ser los cacheos e identificaciones que realiza la Policía tanto en la vía pública como en comisaría, con el fin de que los agentes tengan claro cómo actuar en cada caso.
Este es uno de los principales consensos que se alcanzaron ayer en la segunda reunión de la ponencia que se encarga de estudiar la reforma de esta ley que el PP aprobó en solitario en 2015 y que fue recurrida en el Tribunal Constitucional por el PSOE y otros grupos de la oposición. La reforma se está abordando con el texto del PNV como base.
La cita de ayer, que se prolongó durante casi cinco horas, se saldó con la revisión de diez artículos. Como regla general, los grupos están de acuerdo en que en los cacheos superficiales en la vía pública no se pueda desnudar a la persona, salvo que se trate de una situación de extremo riesgo o emergencia, y en que estos deben hacerse con “proporcionalidad” y con respeto a la intimidad, así como a la identidad sexual de la persona. Asimismo, han resuelto preguntar al Ministerio del Interior cuánto debe ser el tiempo máximo que necesita la Policía para identificar en comisaría a una persona, ya que la vigente norma habla de seis horas pero varios grupos consideran que este plazo es excesivo. Además, los grupos coinciden en la conveniencia de que la reforma legal contemple la obligación de que en estos casos la Policía facilite realizar una llamada. - E.P.