bilbao - Era de dominio público que en el calendario de transferencias elaborado por el Gobierno español no figuraría la gestión económica de la Seguridad Social. El Ejecutivo de Pedro Sánchez argumentó en su día que la materia presenta una gran complejidad para hacerla deprisa y corriendo. Pero más que los argumentos técnicos pesan en la decisión las consecuencias políticas que fuera de Euskadi podría reportar al PSOE y al Gobierno español el traspaso de una materia tan simbólica como esta que representa como pocas la unidad del país. Con 84 diputados sobre 350 y la derecha española con el colmillo afilado, la presión sería axfisiante incluso para Sánchez.
Con todo, el Gobierno Vasco no se resigna y tratará de establecer una mesa de trabajo en paralelo a estas comisiones bilaterales para ir preparando el camino. En este sentido, Josu Erkoreka expresó su “discrepancia total y absoluta” con el hecho de que el Gobierno español no haya introducido esta competencia en el calendario de transferencias y mostró su confianza en que nadie interprete lo recogido en el Estatuto de Gernika como un “brindis al sol”.
En todo caso el portavoz del Gobierno Vasco precisó que el Ejecutivo español tampoco ha formulado en el documento enviado con el calendario una “negativa expresa” a afrontar este traspaso en un futuro. A su juicio, la transferencia del régimen económico de la Seguridad Social es “prioritaria” y aparece recogida en el programa de gobierno del gabinete de Iñigo Urkullu.
En todo caso, subrayó que el Gobierno autonómico, sin renunciar nunca a sus demandas, no tiene intención de “enzarzarse” en discusiones que puedan suponer un retraso de las transferencias que el Gobierno español sí está dispuesto a asumir en los próximos meses.
Por esa misma razón cree EH Bildu que el calendario de transferencias “no tiene ninguna credibilidad”. Así se manifestó ayer el dirigente de la coalición Pello Urizar ya que, a su juicio, “decirnos que en un año van a transferirnos no sé cuántas competencias es una tomadura de pelo. Primero, porque la historia lo desmiente y, segundo, porque nadie puede asegurar hoy que de aquí a un año Pedro Sánchez seguirá estando en La Moncloa”.
Urizar criticó en un comunicado que se haya dejado fuera la gestión del régimen económico de la Seguridad Social, lo que “queda claro que tampoco el PSOE tiene ninguna intención cumplir íntegramente el Estatuto de Gernika y de transferir” esta competencia que sí aparece en el actual programa del Gobierno Vasco, con lo que este documento es “papel mojado”.
Tras remarcar que el problema de fondo es el modelo de relación de Euskadi con el Estado español, basada a su juicio en la subordinación, Urizar destacó que “solo hay un camino” para mejorar el bienestar de los vascos: el pactado por PNV y EH Bildu en las bases del nuevo estatus político para Euskadi que contempla “un modelo de relación de igual a igual con España”.
El PNV considera una buena noticia el envío del calendario con las 33 transferencias, aunque reprocha al Gobierno español que no aborde el traspaso de prisiones de manera inminente. Fuentes de la formación jeltzale señalaron a este diario que es “un paso importante” pero no renuncian a que la de prisiones sea “cuanto antes”, lo mismo que con la gestión económica de la Seguridad Social. En ambos casos apelan al cumplimiento del Estatuto de Gernika y recuerdan que se trata de una ley orgánica.
Por su parte, la secretaria general del PSE, Idoia Mendia, celebró que los Gobiernos vasco y español estén dispuestos a avanzar en el cumplimiento del Estatuto de Gernika y “profundicen” en el autogobierno vasco, frente a “la involución alentada por PP, Ciudadanos y Vox en el conjunto de Estado, cuando abogan en sus pactos por procesos recentralizadores, cuando no ponen en duda de forma explícita la España de las autonomías”.
En un comunicado, la líder de los socialistas de la CAV, Idoia Mendia, destacó que la presencia de los socialistas en las instituciones “a los dos lados de la mesa” permite “desarrollar el autogobierno y completar el Estatuto”. Mendia también se felicitó por “la apertura de un camino leal y riguroso para resolver las discrepancias técnicas y económicas desde un compromiso compartido” y valoró que, casi de forma inmediata, se inicie un proceso de conversaciones que “permitirá profundizar en el autogobierno vasco”. - H. U.
