Gasteiz - El primer proyecto de Presupuestos del Ejecutivo de Pedro Sánchez llega hoy al Congreso sin que se conozca aún si el Gobierno logrará la mayoría suficiente para poder superar las enmiendas a la totalidad y proceder así a su tramitación. Todavía habrá que esperar un mes para despejar la incógnita, ya que la primera votación no se producirá hasta el 13 de febrero. Por el momento, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, se limitará a hacer entrega del documento presupuestario a la presidenta de la Cámara Baja, Ana Pastor, y al presidente de la Comisión de Cuentas, Francisco de la Torre.

Así se inicia un proceso que durará varias semanas. Tras recibir hoy los Presupuestos, la Mesa del Congreso calificará el proyecto y será publicado en el BOE. Con todo ello, se abre un plazo para las comparecencias de los altos cargos del Gobierno, que explicarán las partidas concernientes a sus respectivos departamentos. Después, los grupos parlamentarios deberán decidir si presentan enmiendas a la totalidad -el PP y Ciudadanos ya han anunciado que lo harán- y el debate de las mismas se prevé para los días 12 y 13 de febrero. Las enmiendas se resolverán en una misma votación, ya que todas piden lo mismo: tumbar los Presupuestos y devolverlos al Ejecutivo socialista.

Superar este primer trámite es vital para el Gobierno de Pedro Sánchez y, en esa línea, el propio presidente se dirigió ayer a los grupos parlamentarios para pedirles su apoyo. Sánchez sabe que es el respaldo de los independentistas el que necesita, sin embargo, en esta ocasión fue a Pablo Casado y a Albert Rivera a los que apeló. “Al PP y Cs les pido que se abstengan o voten a favor de unos presupuestos que son buenos para la mayoría de este país”, trasladó el líder de los socialistas en un acto en Burgos.

Pero ni en el PP ni en Ciudadanos están por la labor de dar aire a Sánchez y abstenerse de presentar enmiendas a la totalidad. Es más, el tono en el discurso de la derecha es muy duro contra los socialistas. Ayer mismo, Pablo Casado tachó de “mentiroso” al presidente del Gobierno por decir que va a resistir en La Moncloa hasta 2020, cuando a su juicio se comprometió a convocar elecciones después de la moción de censura. “Es muy duro oír a una persona reconocer que es un mentiroso”, incidió.

Respecto al proyecto presupuestario, el presidente del PP criticó que el Gobierno quiera pactarlo “retorciendo las instituciones” y con el apoyo de los que “quieren romper España”, en referencia a los independentistas catalanes. “Pedro Sánchez es un irresponsable que ahora, una vez más, decide vender España por permanecer en el poder unas semanas o unos meses más”, criticó.

Por su parte, en el seno de Podemos han enviado en los últimos días mensajes de distinto signo. Aunque se daba por hecho su respaldo a las Cuentas al haber pactado medidas económicas con el Ejecutivo de Sánchez, Pablo Echenique ha denunciado “incumplimientos” del acuerdo que les sitúan en el no al proyecto. Sin embargo, el candidato de la formación morada a la Comunidad de Madrid, Iñigo Errejón, empleó ayer un tono más conciliador y reclamó a los socialistas que sean “valientes” y cumplan lo acordado. “Son buenos Presupuestos, son unos Presupuestos que comienzan a hacer justicia social en España, y estoy convencido que van a salir adelante, pero para eso Sánchez tiene que ser valiente y respetar lo pactado”, manifestó.

el pnv apela a los catalanes El respaldo del PNV también se torna indispensable para el Ejecutivo español, y los jeltzales se han mostrado en la última semana receptivos a, por lo menos, permitir la tramitación de las Cuentas. A ese respecto se pronunció ayer el senador Jokin Bildarratz, que mostró una “actitud positiva” hacia el acuerdo y animó al PDeCAT y a ERC a que se unan a la negociación presupuestaria, ya que entiende que “la alternativa que se ha consolidado en Andalucía con PP, Ciudadanos y Vox”, sería muy perjudicial a nivel nacional.

No parece sin embargo que a Sánchez le vaya a resultar fácil conseguir el apoyo de los independentistas, por lo menos en lo que concierne al PDeCAT. Su vicepresidenta Miriam Nogueras tachó las partidas destinadas a Catalunya en las Cuentas de “migajas” y dijo abiertamente que su partido está en el “no a los Presupuestos” y en el “no a la tramitación”, mientras no haya “una respuesta política” por parte del Gobierno al conflicto catalán. “No compramos el marco mental que se quiere instalar en que si no aprobamos los presupuestos viene el lobo en forma de ultraderecha”, enfatizó.