las nuevas informaciones publicadas esta semana por moncloa.com y El Confidencial muestran que Villarejo llegó a pinchar incluso conversaciones telefónicas con la sede de la Presidencia del Gobierno y a espiar a periodistas y empresarios supuestamente por encargo del BBVA. Ya sea en el sumario del caso Tándem que se instruye en la Audiencia Nacional, ya sea en grabaciones que hizo el excomisario y que ahora han sido divulgadas o en sus propias declaraciones públicas, la nómina de clientes, víctimas, amigos y enemigos de Villarejo sigue en aumento.
Han sido al menos 25 años de dudosas labores de consultoría y algunas de las personalidades públicas, instituciones o empresas afectadas son las siguientes:
BBVA.- El propio banco ha hecho público un comunicado en el que explica que desde junio de 2018 investiga la contratación y servicios prestados a la entidad por el Grupo Cenyt, después de que El Confidencial y moncloa.com publicaran que Villarejo controló miles de conversaciones telefónicas de altos cargos del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, empresarios y periodistas por encargo del banco.
María Teresa Fernández de la Vega.- Vicepresidenta del Gobierno entre 2004 y 2010. Es una de las personas supuestamente espiadas por Villarejo en pleno intento por parte de Sacyr se hacerse con el control del BBVA.
Miguel Sebastián.- Jefe de la Oficina Económica de la Presidencia del Gobierno en el momento de las supuestas escuchas. En las grabaciones aparece una supuesta conversación de quien posteriormente fuera ministro de Industria con el jefe de gabinete del Banco Santander, Ignacio Rupérez, en la que hablan de los planes de Sacyr para controlar el BBVA.
Luis del Rivero y Juan Abelló.- Presidente y vicepresidente de Sacyr. Ambos fueron supuestamente espiados por Villarejo por encargo del BBVA para conocer sus planes para arrebatar el control de la entidad a su entonces presidente Francisco González.
Manuel Conthe y Carlos Arenillas.- Presidente y vicepresidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores en 2004. Ambos responsables del organismo regulador fueron, según El Confidencial y moncloa.com, supuestamente espiados en el momento en el que la CNMV debía resolver sobre una denuncia contra Francisco González por presuntas irregularidades en la venta de la sociedad de bolsa FG Valores.
Rodrigo Rato.- Entonces director gerente del FMI y exvicepresidente en el Gobierno de Aznar. Su teléfono es uno de los muchos que presuntamente fueron controlados por Villarejo en esa operación.
Corinna zu Sayn-Wittgenstein.- Empresaria y amiga de Juan Carlos I. Tuvo un encuentro con Villarejo en Londres en 2015 -grabado por el excomisario-, en el que presuntamente habló de cuentas en Suiza que habría tenido el monarca y de comisiones que -según ella- el rey emérito supuestamente percibió por el contrato del AVE a La Meca, adjudicado en 2011 a doce empresas españolas.
Félix Sánz Roldán.- Director del CNI. Villarejo lo considera su principal enemigo y culpable de las filtraciones que acabaron con su carrera y lo llevaron a la cárcel. El excomisario pedirá al juez declarar para “destapar la verdad” sobre el CNI.
Jorge Fernández Díaz y Eugenio Pino.- Exministro del Interior con Rajoy y ex director adjunto operativo de la Policía. A sus órdenes supuestamente se hizo cargo de trabajos como la operación Cataluña contra políticos independentistas y la familia Pujol o del informe PISA sobre las cuentas de Podemos.
Luis Bárcenas.- Extesorero del PP. El Ministerio del Interior -de nuevo bajo el mandato de Fernández Díaz- encomendó a Villarejo robar a Bárcenas sus “papeles” sobre la presunta financiación irregular del PP y el cobro de sobresueldos por sus principales dirigentes. Se trata de la operación Kitchen, y en ella se destinaron al menos 48.000 euros de fondos reservados para pagar al chófer de Bárcenas, Sergio Ríos.
María Dolores de Cospedal.- Exsecretaria general del PP y exministra de Defensa. Grabada por Villarejo (junto a su marido, Ignacio López del Hierro). Encargaron al comisario informes sobre un hermano de Alfredo Pérez Rubalcaba y que espiara a su compañero en el PP, Javier Arenas.
Ignacio González.- Expresidente de la Comunidad de Madrid. También fue supuestamente grabado por Villarejo y, en concreto, en una conversación en la que también estaba presente el comisario Enrique García Castaño, conocido como El gordo, sobre el polémico ático del exdirigente autonómico en Estepona (Málaga). Por este caso, otra cara conocida, el presidente del Atlético de Madrid, Enrique Cerezo, tuvo que declarar ante un juzgado de Instrucción de Estepona.
Artur Mas.- Expresidente de la Generalitat. En la documentación incautada a Villarejo y que ha sido remitida al juez, obran informes sobre Mas entre otros políticos y dirigentes catalanes, así como sobre las finanzas de Unió Democrática de Catalunya (UDC).
Dolores Delgado y Baltasar Garzón.- Ministra de Justicia y exjuez de la Audiencia Nacional. Villarejo les grabó en una comida que compartieron en 2009 junto a varios mandos policiales, en la que presuntamente se habló de casos en estudio en ese momento; de policías y jueces en la Audiencia -uno de ellos el actual ministro, Fernando Grande-Marlaska- o de cuestiones internas del tribunal. Estas grabaciones costaron a la ministra la reprobación en el Congreso.
Baltasar Garzón.- En otra de las conversaciones grabadas por Villarejo, éste presuntamente relató que se reunió con Garzón y otros policías para “preparar la Gürtel” un día antes de que éste admitiese a trámite la causa. Este caso está siendo investigado por un juez de Madrid.
Fernando Grande-Marlaska.- Ministro del Interior. Villarejo le acusa de estar detrás de la filtración de la operación Kitchen.
Ángel Olivares.- Actual secretario de Estado de Defensa. Presuntamente, Villarejo afirmó en una grabación que Olivares, entonces concejal socialista en Burgos, le pagó para espiar al entorno de José María Aznar cuando éste era presidente de Castilla y León, entre julio de 1987 y septiembre de 1989, un asunto que éste negó.
Gabriel Obiang.- Hijo del presidente de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang. El denominado proyecto King consistía en sacar trapos sucios de Gabriel para desprestigiarlo en beneficio de su hermano Teodoro.
Elisa Pinto.- Villarejo tiene una orden de alejamiento sobre la doctora, quien le identificó en el juzgado como el hombre que la apuñaló el 10 de abril de 2014 en presencia de su hijo. Le acusa de trabajar de manera encubierta para el empresario Javier López Madrid -a quien la dermatóloga denunció por acoso sexual, agresión y amenazas- y de estar detrás de todos los mensajes amenazantes que ella recibió. El excomisario está imputado.
Javier López Madrid.- Exconsejero de OHL. Admitió que contactó con Villarejo para buscar asesoramiento como abogado. Pero según la doctora Pinto, López Madrid le contrató y fue entonces cuando empezó a sentirse espiada y con el teléfono pinchado. Villarejo justificó contactos con el empresario porque temía que esta situación con la doctora pudiera terminar perjudicando al rey, amigo del empresario.
El pequeño Nicolás.- Una jueza de Madrid cree que el excomisario ordenó grabar la reunión que mantuvieron agentes de Asuntos Internos de la Policía y del CNI sobre Francisco Nicolás Gómez Iglesias, el pequeño Nicolás, y que estuvo detrás de la filtración de esa grabación. Está procesado en esta acusa.
Marcelino Martín Blas.- Excomisario de Asuntos Internos de la Policía Nacional. Mantienen una guerra abierta desde que Villarejo le recriminara por acusar a un grupo de policías de colaborar con la mafia china, una cuestión que salpicó también a su hijo. Antes de su enfrentamiento, trabajaron juntos en la operación Cataluña.
Familia García Cereceda.- Susana García Cereceda, dueña de la lujosa urbanización La Finca, en Pozuelo de Alarcón (Madrid), contrató a Villarejo para obtener información de su hermana, Yolanda, en la guerra familiar por la herencia de su padre, Luis García Cereceda.
Juan Muñoz.- Empresario y marido de la periodista Ana Rosa Quintana (Tele 5). Imputado junto a su hermano en la Audiencia Nacional por supuestamente encargar a Villarejo que investigara y extorsionara al magistrado inhabilitado Francisco Javier de Urquía y lograr así el cobro de una deuda.
Ángel Pérez-Maura.- Naviero español cuya extradición a Guatemala rechazó la Audiencia Nacional, decisión en la que se investigó el papel de Villarejo y un supuesto intento de influir para evitar esa extradición, con el que algunos medios relacionaron al exjuez Baltasar Garzón y a la actual ministra de Justicia, Dolores Delgado. -A.E.