vitoria - El consejero de Hacienda y Economía, Pedro Azpiazu, afirmó ayer que la transferencia de la gestión del régimen económico de la Seguridad Social “está pendiente, está claramente establecida en el Estatuto de Autonomía y hay que abordarla sí o sí, si no es a corto plazo, será a medio plazo”.
El consejero del Gabinete de Iñigo Urkullu aludió de este modo a la negociación de competencias pendientes de transferir a Euskadi y apeló en una entrevista en Onda Vasca a “darnos cierta calma porque el desarrollo estatutario no es, como se ha visto, nada fácil”. Azpiazu recordó que los gobiernos vasco y central han acordado elaborar un calendario de transferencias y “unas van a ser más fáciles de ser transferidas y pueden ser realizadas en menos tiempo”, mientras que “otras puede ser que sea necesario trabajarlas más y puede ser necesario, por ello, utilizar más tiempo”.
En cualquier caso, remarcó, preguntado por las reticencias a transferir la gestión del régimen económico de la Seguridad Social, que esta competencia “está pendiente, está claramente establecida en el Estatuto de Autonomía y hay que abordarla sí o sí”. “Si no es a corto plazo, será a medio plazo, pero es una cuestión que está ahí pendiente y que hay que tratar de abordarla”, recalcó el consejero.
Hace pocos días, y a pesar de que no está prevista su inclusión en el calendario de transferencias que está elaborando el Ejecutivo español, el Gobierno Vasco precisó que no renuncia a obtener en un futuro la competencia del régimen de la Seguridad Social. Así lo expresó el portavoz del Ejecutivo autonómico, Josu Erkoreka, que defendió la creación de ese grupo de trabajo entre Gasteiz y Madrid para “desbrozar el camino y las dificultades” que acarrea este proceso. De cualquier manera, Erkoreka explicó que el traspaso es “difícil y probablemente largo”, debido en parte a que el Gobierno de Pedro Sánchez tiene “ataduras” en esta materia. “Aunque nosotros otorgamos a esta transferencia carácter prioritario, las resistencias del Gobierno español están siendo numantinas”, lamentó.
La competencia de Prisiones no es de las que más dificultad ni jurídica ni financiera ni técnica plantean, pero quizá se dé “una dificultad política que el Gobierno español deberá explicar” en caso de producirse. Y es que las primeras transferencias sobre la mesa serán aquellas que menor grado de dificultad representen. - DNA/E. P.