bilbao - A pesar de que no está prevista su inclusión en el calendario de transferencias, el Gobierno Vasco no renuncia a obtener en un futuro la competencia del régimen de la Seguridad Social. Así lo expresó ayer el portavoz del Ejecutivo autonómico, Josu Erkoreka, que defendió la creación de un grupo de trabajo entre Gasteiz y Madrid para “desbrozar el camino y las dificultades” que acarrea este proceso. De cualquier manera, Erkoreka explicó que el traspaso es “difícil y probablemente largo”, debido en parte a que el Gobierno de Pedro Sánchez tiene “ataduras” en esta materia. “Aunque nosotros otorgamos a esta transferencia carácter prioritario, las resistencias del Gobierno central están siendo numantinas”, lamentó en una entrevista concedida a la Cadena Ser.
Respecto al resto de transferencias pendientes, el también consejero de Autogobierno confió en tener noticias durante el mes de enero respecto al calendario, que aún no ha sido entregado al Gobierno Vasco. En este sentido, Erkoreka reconoció que su elaboración “tiene su dificultad”, aunque les consta que el Ejecutivo socialista ya está trabajando en ello. “Hemos hecho alegaciones y les hemos dado nuestro listado de prioridades, pero ellos también tienen sus condicionantes y operan con arreglo a ellos”, explicó.
De este modo, el consejero considera que no pasará mucho tiempo antes de que el Ejecutivo de Iñigo Urkullu tenga “conocimiento de un calendario que permita organizar las transferencias en próximos meses”. Tras advertir de que entre que haya y no haya transferencias “no hay término medio”, ya que “o las hay o no las hay”, sí matizó que en relación a la gestión del régimen de la Seguridad Social “otra cosa es que sea necesario concretar” en qué consistiría.
Sobre esta última transferencia, uno de los inconvenientes es que nunca se ha puesto en práctica en otra autonomía. “Hasta la fecha no tiene precedentes por ser una transferencia que no se ha llevado a cabo a ninguna otra comunidad autónoma. Estaríamos explorando caminos desconocidos y construyendo un modelo en el que cabe un margen de descentralización y hasta la fecha no se ha abierto esa posibilidad. Ese es un tema abierto a debate en el que habrá contraste y puntos de vista diferentes”, relató. Por ello, Erkoreka es consciente de que se trata de un ámbito que “requerirá tiempo para alcanzar un acuerdo”.
primero, las más sencillas Por lo que respecta al resto de 37 competencias sobre las que sería posible avanzar, el portavoz del Ejecutivo vasco apuesta por “anteponer las que menos dificultad” presentan: “Las primeras serían las más sencillas, las que menor dificultad entrañan desde el punto de vista técnico y jurídico”. En este sentido, reconoció que la competencia de Prisiones “no es de las que más dificultad ni jurídica ni financiera ni técnica plantean”, pero quizá se dé “una dificultad política que el Gobierno central deberá explicar” en caso de producirse. “Con ETA ya definitivamente liquidada no veo cuál puede ser el motivo por el que 40 años después alguien se resista a hacer efectiva la transferencia”, concluyó. - DNA