GASTEIZ - Como socia del PNV en el Gobierno Vasco, Idoia Mendia pronunció ayer el discurso más conciliador e institucional posible, con múltiples apelaciones al acuerdo y buen tono, pero no por ello revisó la posición del PSE en el debate del nuevo estatus de autogobierno, que sigue siendo una isla de discrepancia en la buena marcha de su pacto con los jeltzales. Mendia ejerció de cortafuegos y protegió al presidente Sánchez después de que el lehendakari pidiera al Estado que reconociera su carácter plurinacional. La líder de los socialistas vascos se tomó la apelación de Urkullu como un intento de colocar la presión en Sánchez para que desbloquee el debate, y despejó el balón: “No es responsabilidad del presidente Pedro Sánchez arreglar lo que aquí no se ha sabido encauzar”.

El pleno celebrado ayer en el Parlamento Vasco no sirvió para alumbrar novedades en el debate del estatus. La intervención del lehendakari no calmó al socialismo. Urkullu quiso dar un barniz de normalidad a la apuesta por una relación de igual a igual con el Estado, y mencionó cómo dentro de Europa se ha conseguido dar encaje a realidades nacionales en Bélgica o Suiza. Pero Mendia se enrocó en el discurso ya conocido del socialismo: es necesaria una reforma previa de la Constitución española. A renglón seguido, pidió al PNV que presente una propuesta que “se pueda llevar a la práctica”. Además, no dio crédito a sus llamamientos al acuerdo porque, a su juicio, se da por cerrada la apuesta por un modelo confederal.

Mendia declaró la buena salud del pacto de gobierno porque “se está cumpliendo lo recogido en el programa de legislatura”, pero puso en evidencia que no hay acuerdo sobre el autogobierno y que, a pesar de la libertad que se dieron los socios en este punto, sí se comprometieron a respetar la legalidad y la pluralidad. “Usted defiende un modelo confederal. Yo defiendo el federal. Y estamos en uno autonómico que solo se puede cambiar si reformamos la Constitución. Si no es así, y lo sabe usted, lo que ahora plantea solo generará esa frustración de la que usted y nosotros queremos huir”, zanjó.

adalid del acuerdo El discurso de Mendia deja ver que no habrá grandes novedades en el debate del estatus en los próximos ocho meses, donde los juristas van a tomar el relevo de los partidos para redactar un articulado. El PSE mantiene sus posiciones, y nada apunta a que vaya a cambiar, al menos hasta que se abra una segunda negociación cuando los juristas acaben su labor después de las elecciones municipales y forales de mayo.

Mendia se presentó como una firme defensora de los acuerdos, en este y en otros ámbitos. Según dijo, su partido no se rendirá. En su discurso estuvo muy presente la apuesta por la igualdad entre mujeres y hombres, puso en valor las actuaciones que prepara la consejería de Trabajo sobre la racionalización de horarios o las cláusulas sociales; y aludió también a la reforma de EITB y vio posible el consenso a la luz del entendimiento para renovar la cúpula de la radiotelevisión española. En materia de convivencia, recalcó que las víctimas siguen esperando que se reconozca que el daño causado fue “profundamente injusto”, y pidió esclarecer las muertes de los tres gallegos asesinados en Iparralde en 1973 y el caso Pertur. Además, se refirió a los abusos policiales y recordó que el Estado de Derecho “se fortalece cuando reconoce sus fallas y las corrige”.

Estatus. Pidió una propuesta viable y que no excluya a ninguna identidad. Aclaró que Sánchez no puede arreglar lo que la Ponencia no haya logrado hacer.

Acuerdos. Dijo que su partido va a hacer lo posible para conseguir acuerdos, también en materia social y sobre la igualdad entre mujeres y hombres. Reivindicó que el PSE ha estado en los pactos históricos.

Convivencia. Exigió dejar claro que nadie debió ser amenazado, secuestrado, torturado ni asesinado, ni por ETA ni con la excusa de ETA, en alusión a los abusos policiales: “El daño causado ha sido inútil e injusto”.