MADRID - La ya expresidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, cobrará como mínimo un sueldo de 3.503,46 euros al continuar como diputada del PP con “dedicación exclusiva” en la Asamblea de Madrid. Estos datos se desprenden del Portal de Transparencia de la Cámara regional, donde queda expuesto que un diputado de la Asamblea con “dedicación exclusiva” cobra 3.503,46 euros brutos al mes, aunque varía en base a otros factores. En concreto, este sueldo puede variar en función de si pertenece a alguna comisión. Si es presidenta de comisión, obtendría un extra de 677,58 euros; vicepresidenta, 508,18 euros más; secretaria de comisión, 508,18 euros más y si es portavoz de Grupo Parlamentario de alguna comisión tiene un plus de 846,97 euros.

También podrá percibir una indemnización específica, si percibe una de estas funciones, de 1.221,83 euros. No obstante, para que Cifuentes comience a recibir este sueldo tendrá que tomar primero posesión como diputada en el Parlamento madrileño.

En el documento que Cifuentes envió a la presidenta de la Asamblea Paloma Adrados para hacer efectiva su renuncia al cargo de presidenta de la Comunidad de Madrid, le comunicó que desde que se haga formalmente efectiva su dimisión, su dedicación como diputada en la Asamblea de Madrid será en régimen de “dedicación exclusiva”.

En el entorno de la expresidenta, incluido el presidente en funciones, Ángel Garrido, aseguran que Cifuentes “lo está pasando mal” tras semanas de polémica por su máster y la difusión del vídeo del hurto de las cremas, e incluso el que era su número dos afirmó que ella no le ha dado indicaciones para sustituirla más allá de “trabajar por los madrileños”.

Garrido subrayó que Cifuentes “en muchas cosas es excepcional”, explicó que el miércoles habló varias veces con ella, también por la noche, pero no ayer, y añadió que “lo está pasando mal” porque “aunque parezca una obviedad, los políticos somos personas y sufrimos”. “Es un día muy doloroso para cualquier persona”, apuntó.

Respecto a si Cifuentes debe seguir siendo presidenta del PP de Madrid, matizó que se trata de una decisión que solo corresponde a dos personas: “a ella misma, de querer seguir siéndolo, y al presidente nacional del partido”. - E. P.