barcelona - ERC y PDeCAT mostraron ayer su disposición a formar Govern cuanto antes aireando también sus diferencias en la estrategia después de que Carles Puigdemont expresara su disposición a que haya president lo más pronto posible pero sin urgencias hasta el próximo 22 de mayo. Los republicanos rechazaran apurar los plazos e instaron al expresident a poner las instituciones “al servicio de la ciudadanía”, mientras que los postconvergentes precisaron tener en cuenta “la situación de no normalidad” que vive Catalunya y la dificultad para encontrar un candidato que pueda erigirse en líder del próximo Ejecutivo catalán.
La portavoz de los republicanos, Marta Vilalta, dejó claro que para formar un gobierno se requiere una investidura “efectiva”, lo que implicaría un candidato sin impedimentos para ser el nuevo president. Lo cree algo prioritario porque solo así se puede avanzar para la consecución de la república catalana. “Y sin un Govern somos más débiles”, matizó. Una de las claves para una posible investidura es Toni Comín y la delegación de su voto, algo en lo que confían.
El PDeCAT apoyó la palabras de Puigdemont en su apuesta por un Govern con el aviso de unas posibles nuevas elecciones por el complejo escenario. Valoran incluso la reforma de la Ley de Presidencia para investirle a él a distancia. “Es una manera más de intentar saltar estos muros que nos ponen desde el Estado español”. - I.S.M.