Barcelona - “Auxiliar a los heridos y dar consejo a las personas que se encuentren en los alrededores”. Estas fueron las instrucciones que recibieron los Mossos d’Esquadra para la jornada del 1-O, mientras que la Policía española seguía órdenes que los agentes catalanes no tenían, las de acudir a los colegios para evitar la votación, tal como había instado el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya. Eso se desprende de las grabaciones de la emisora de los Mossos desveladas ayer por La Vanguardia, y que constatan que la Policía catalana no se coordinó con la española y se sorprendió ante su presencia y por unas cargas que les resultaron inesperadas.

Los audios permiten establecer una narración cronológica de los hechos muy detallada de aquella jornada electoral que arrancó a las 6.27 horas y prosiguió de forma ininterrumpida hasta las 23.29 horas para un total de más de mil comunicaciones. Desde esa primera hora hasta las 8.57 horas el día se inició de manera pacífica con las patrullas de los Mossos recorriendo la ciudad y encontrándose en los colegios con multitud de ciudadanos. Los agentes no podían acceder a los colegios debido a las aglomeraciones: “No podemos acceder porque hay mucha gente y nos lo impiden”, relató un policía a las 6.38 horas. “No podemos acceder a la puerta, no nos dejan”, indicó uno de sus compañeros a las 6.43 horas.

Cerca de las nueve de la mañana abrieron los colegios. “Los concentrados no nos dejan entrar”. Es la frase que repiten las patrullas hasta que llega el momento de instalar las urnas. A las 8.57 cuentan desde la calle Consolat del Mar que “han subido dos personas que están intentando constituir dos mesas”. Los agentes se veían incapaces de identificar a las personas que querían poner las urnas a pesar de encontrarse de forma pacífica, una escena que se repite en varios puntos de la ciudad. “Hay urnas puestas, pero no podemos entrar ni identificar a nadie”, decía otro mosso a las 9.02.

“Que nadie se ponga el casco. El casco, fuera de la cabeza”. Ésa es la única instrucción que tuvieron hasta el momento desde la centralita ante la petición de una patrulla que vio acercarse una manifestación con el lema Por una tierra sin amos y sin fronteras. Fue a las 9.04 cuando irrumpe la primera patrulla de la Policía española. “El CNP antidisturbios se está acercando a la Barceloneta. Están llegando. Acaban de llegar furgonetas del CNP. Están cargando”, explicaba un mosso. “Están cargando contra todos”, añadió otro agente en un audio en el que se escuchan con claridad al fondo los gritos de los ciudadanos. A esa hora hay una nueva instrucción meridianamente clara: “Priorizar la asistencia a las personas que hayan podido resultar heridas, por favor”.

primeros heridos Cinco minutos después de las nueve las patrullas empezaron a contar heridos y pedir ambulancias. “Hay un chico con un corte en la boca que ha recibido un golpe. Hay heridos, tenemos que trasladarlos al Hospital del Mar. Tenemos una persona de 80 años a la que le han pisado la mano”. Son los mensajes que se lanzaron desde coches patrulla de toda la ciudad. A las 9.18 horas una patrulla pidió “instrucciones para mantener nuestra seguridad y la de la gente de los colegios”. Directrices que llegaron a las 9.43. “Para todos los efectivos de Sant Andreu, en caso de carga de la Policía, nuestra tarea es auxiliar a los heridos y dar consejo a las personas que se encuentren en las inmediaciones”, fue la respuesta.

A las 9.43 los Mossos se enteraron de que la Policía española había cargado contra los votantes por todo Barcelona y notaron que los ánimos se encendían porque “la gente empieza a faltar y a insultar”. A las 10.00 horas un mosso llamó a la centralita: “Ya pueden ir pidiendo unas ambulancias, porque esto no va a acabar bien”. En paralelo, la Policía Nacional se iba de algunos colegios y los ciudadanos procedían a votar con cierta normalidad, aunque no en toda la ciudad.

A las 11.00 horas las cargas se trasladaron a la Escola Pia de Sant Antoni, donde se vivió un momento crítico. “Usted no intervenga, usted no intervenga. Por favor, manténgase al margen y salga de la zona de conflicto”, conminaron a la patrulla de los Mossos desplazada a ese lugar.

El exconseller de Interior Joaquim Forn acusó al coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos, coordinador entre los tres cuerpos policiales, de dejar de lado a los Mossos.