Elkarrekin Podemos presentó ayer su propuesta definitiva para actualizar el Estatuto de Gernika con escasas variaciones a los textos presentados en la fase preliminar de la Ponencia de Autogobierno. No obstante, sí que detalló una cuestión nuclear que podría acarrear ciertas reticencias por parte del PNV, pero sobre todo de EH Bildu. La coalición sigue aspirando a desarrollar una ley de claridad al estilo canadiense para vehiculizar el derecho a decidir en lo que respecta al ámbito territorial, pero huye de una “soberanía diferenciada” con respecto al Estado a pesar de reconocer “el carácter nacional de Euskadi”. Pide separar el debate de esa ley en otra mesa diferente.
Avancemos - Bidea Egin Dezagun, que es como se denomina el texto de Elkarrekin Podemos, sigue por los derroteros de los “acuerdos transversales” que superen la fórmula de la “mayoría de la mitad más uno” como método para elaborar un nuevo Estatuto al que la coalición no resta el “carácter fuertemente político”, pero suma el blindaje de los derechos sociales. Instalado el derecho a decidir en el centro mismo del tira y afloja de los partidos, mantiene diferenciar en dos mesas el debate de su ejercicio y la inclusión de “un pacto o ley de claridad como se hizo en Canadá y Quebec”, siempre “respetando la legalidad vigente”. Esta propuesta de pacto “ha sido enarbolada por el lehendakari Urkullu y recientemente por EH Bildu”, recuerdan. Pero “en relación con la dimensión territorial, es preciso explicar que no es un todo o nada”, advierten sobre las posibles posiciones maximalistas en favor de aplicar el derecho a la autodeterminación que puedan bloquear la ponencia.
La coalición se sale de las fronteras de la Comunidad Autónoma Vasca en sus postulados para el ámbito territorial al asegurar que “proponer mecanismos e instrumentos de vinculación con otros territorios con los que compartimos vínculos sociales, económicos y culturales, como son Navarra e Iparralde, también formaría parte del ejercicio del derecho a decidir”. Aunque sin mentar a una hipotética incorporación, el abordaje a las futuras relaciones se llevaría a cabo “desde el respeto a la voluntad de la ciudadanía de estos territorios”.
competencias Otra de las claves para Elkarrekin Podemos radica en que las competencias de las instituciones vascas estén garantizadas “frente a lecturas y relecturas recentralizadoras por parte del Estado”. De hecho, abundaron en que “no se trata únicamente de ampliar el elenco de competencias que ejercemos, ni tan siquiera de que lo hagamos en un régimen de exclusividad, sino de acordar mecanismos de gobernanza e, incluso bilateralidad, que las salvaguarden y protejan”. Así, califican de “fundamental” que cada competencia que se ejerce o se quiera ejercer se vincule de forma directa y explícita a la mejora del bienestar social.
Ante un eventual riesgo de bloqueo en la ponencia, Elkarrekin Podemos plantea por último elaborar un borrador de síntesis que recoja los consensos y disensos, otorgando un plazo de 10 días para que las formaciones maticen sus propuestas. Posteriormente se abrirían sendos debates sobre los disensos “que no se prolongarán más de tres meses”. Reelaborado un documento, abría un nuevo periodo para perfilarlo. De forma paralela se abrirían procesos de carácter deliberativo en los que participe la sociedad. - I. Fradua