Bilbao - El Juzgado de Instrucción número 3 de Teruel que investiga los tuits ofensivos contra los dos guardias civiles, Víctor Romero Pérez y Víctor Jesús Caballero, que fueron asesinados en la localidad turolense de Andorra el pasado mes diciembre junto al agricultor José Luis Iranzo ha levantado esta semana el secreto del sumario, según informaba ayer fuentes de la Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC).
La AEGC apunta en un comunicado que aunque se ha levantado el secreto de sumario la instrucción sigue adelante al haberse constatado la existencia de “claros indicios de delitos de odio e injurias graves” a funcionarios públicos que están tipificados en el Código Penal.
La asociación, que engloba todos los Empleos y Escalas de la Guardia Civil, recuerda que tras el asesinato de dos agentes y un ganadero en Andorra a manos de Igor el Ruso, se vertieron tuits y comentarios injuriosos en las redes sociales en los que las personas investigadas mostraban su alegría por el fallecimiento en acto de servicio de los dos agentes, no del ganadero. La asociación de la Guardia Civil añade, además, que de la instrucción llevada a cabo por el juez hasta el momento se desprende la “profesional y laboriosa” actuación de los agentes que fueron abatidos, pertenecientes al cuartel de Alcañiz, ya que la Guardia Civil realizó las indagaciones necesarias, monitorizó los mensajes objeto de delito y localizó a las personas implicadas, llegando a producirse detenciones para su inmediata puesta a disposición del juzgado instructor al cargo.
La AEGC, que lleva la acusación particular en nombre de la viuda de uno de los agentes, continuará participando de forma activa en las sucesivas pruebas que se practiquen y propondrá todas aquellas que se estimen oportunas con el objeto de lograr un pronunciamiento judicial que logre el castigo penal merecido y el máximo resarcimiento para la familia. “Un castigo que también contribuya a salvaguardar los derechos de todas las mujeres y hombres integrantes de la Guardia Civil en otros posibles casos de ataque de odio a su legítima condición profesional”, añade el comunicado hecho público por la AEGC. - Efe