Donostia - Zarautz alumbró ayer durante el homenaje al exedil del PP asesinado por ETA hace 20 años, José Ignacio Iruretagoyena, una declaración que denunció un atentado “radicalmente injusto” y tras el que el Consistorio pidió “perdón” a la familia si como institución “o de forma individual” no han estado a la altura en estas dos décadas.
El texto comienza con un recuerdo del ataque y con una cita de la declaración que se aprobó en el pleno extraordinario del mismo 9 de enero de 1998. Iruretagoyena era una persona “leal que, unido a su juventud y jovialidad, había logrado una gran simpatía del resto de concejales del Ayuntamiento”.
El Consistorio quiso ayer hacer “memoria, brindar homenaje y ofrecer un reconocimiento institucional” a su exedil que “nunca debió ser asesinado”. Una expresión que se recogió en la placa que se descubrió en el Salón de Plenos y que durante su alocución, consensuada con los portavoces de PNV, PSE e Irabazi, el alcalde, el jeltzale Xabier Txurruka, extendió a todos los atentados de ETA: “Nunca debió ocurrir este atentado, ni ningún otro. No hay justificación. Fue radicalmente injusto”.
“Ni una causa política, ni ninguna otra certeza deben situarse por encima del valor de los derechos humanos, la persona y la vida”, fija la declaración, que considera que “matar o herir a un semejante, incluso amenazar, extorsionar o acosar es siempre una crueldad”. “ETA atacó a una buena persona, vulnerando el derecho humano más básico”, afirmó el primer edil en una declaración en la que mostró su voluntad de compartir una “reflexión crítica sobre lo que no se ha hecho, se ha hecho de manera silenciosa o se ha hecho tarde, o sobre lo que nos ha dividido frente a lo que realmente nos une”.
“Hoy nos une el rechazo a la violencia y la solidaridad con las víctimas”, expresó, y en una fórmula que recordó a la que utilizó el alcalde de Errenteria, Julen Mendoza (EH Bildu), en el homenaje a las víctimas de ETA en junio, Txurruka se dirigió a los allegados de Iruretagoyena, a quienes expresó que “si alguna vez el Ayuntamiento o los partidos representados en la propia institución o de forma individual no hemos estado a vuestro lado o si lo habéis sentido así, os queremos pedir perdón”.
El alcalde zarauztarra leyó la declaración que se guardó con celo hasta última hora frente al público y ante los portavoces y los concejales de todos los grupos, que ofrecieron la imagen unitaria de asistir al acto, aunque EH Bildu decidiera al final no suscribir el texto, pese a que sí secundó el homenaje.
La duda sobre lo que podía pasar con una declaración que se ha trabajado de manera discreta y que los portavoces debían firmar el lunes residió hasta el final. Tanto que los responsables de las cuatro formaciones con representación en Zarautz se citaron de nuevo ayer a las 10.00 horas. No hubo un acuerdo unánime y pasado el mediodía, el PSE publicó una nota en la que denunció que EH Bildu no había informado ni siquiera sobre si acudiría al acto de homenaje, “una sorpresa de última hora que cuesta entender”.
Hacia la convivencia El portavoz de la coalición soberanista, Mikel Goenaga, atendió a este medio antes del homenaje y quiso “poner en valor el acto mismo de reconocimiento y reparación de la figura de Iruretagoyena”. Cuestionado por las críticas vertidas desde el PSE, aseguró que “no son correctas”, aunque evitó profundizar porque ayer no era “un día para la polémica”. Añadió que “el problema no es de terminología”, sino que “hay aspectos que también hay que poner sobre la mesa. Todos tenemos voluntad para ello”.
“Hemos hecho nuestras aportaciones para sacar un texto, hemos visto que tenemos puntos de encuentro, pero quedan otros que tendremos que abordar”, aseveró. Ayer, insistió, había que destacar un acto “importante en el camino de la convivencia y que hubiese sido imposible hace no tantos años”.