BARCELONA - Interior retirará de forma progresiva hasta este próximo sábado a los agentes de la Policía y la Guardia Civil desplegados en Catalunya. Según informaron fuentes policiales, el día 30 no quedarán efectivos de refuerzo de ambos cuerpos en territorio catalán, por lo que se pondrá fin a la denominada Operación Copérnico, en marcha desde semanas antes de la celebración del referéndum del 1 de octubre.

Tanto los agentes que se alojaban aún en los dos cruceros atracados en el puerto de Barcelona, el Rhapsody y el GNV Azzurra, como lo que permanecían en otros hoteles y dependencias militares volverán a sus destinos, si bien se mantendrán as plantillas de Policía y Guardia Civil de Catalunya, así como el refuerzo de unidades de antidisturbios que se desplazan a territorio catalán habitualmente.

Desde el inicio de despliegue, que se llegó a cifrar de forma extraoficial en casi 20.000 agentes en algunos momentos incluidas las plantillas fijas de ambos cuerpos, Interior ha prorrogado en varias ocasiones las órdenes de comisión de servicio de estos efectivos, que, aunque en menor número, se han mantenido durante la campaña y la jornada electoral del 21D.

La Operación Copérnico no ha sido ajena a las críticas, especialmente de los sindicatos y asociaciones de guardias civiles, que en estos meses han denunciado las condiciones de la estancia de algunos alojamientos, especialmente el ferry conocido popularmente como el Barco de Piolín, el cual fue desalojado y zarpó del puerto de Barcelona el pasado 16 de diciembre. Así, Interior ha gestionado diversas crisis por los problemas con la comida, las dietas y descansos, y también con los escraches que se llevaron a cabo en varios hoteles tras las actuaciones policiales en el referéndum del 1 de octubre.

Reun ión con ZOido En este contexto, el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, mantuvo ayer reuniones con sindicatos de la Policía y asociaciones de la Guardia Civil ante quienes se compronmetió a una mejora salarial que les equipare con otros cuerpos policiales, así como de medios materiales y una “dignificación” de las condiciones de trabajo diario a partir de la puesta en marcha de un plan de mantenimiento y construcción de nueva instalaciones.

El compromiso, según explicó Interior en un comunicado, es celebrar el día 16 de enero una reunión extraordinaria tanto del Consejo de la Policía como del Consejo de la Guardia Civil, “para iniciar las negociaciones tendentes a concretar sus necesidades”.

Los cinco sindicatos de la Policía y las ocho asociaciones de la Guardia Civil anunciaron a traves de una unidad de acción el 29 de noviembre que iniciaban un calendario de movilizaciones ante la falta de concreción en la cuantía y plazos para proceder a la equiparación con otros cuerpos. - Efe/E. Press