BILBAO - El colectivo de víctimas del terrorismo Covite acusó ayer al Ejecutivo de Iñigo Urkullu de “retorcer la realidad para ajustarla al relato de la tortura sistemática promovido históricamente por el entorno de ETA”, mediante el informe sobre abusos policiales publicado el lunes. De esta manera, la asociación que preside Consuelo Ordóñez denuncia que el Gobierno Vasco promueve “un falso empate entre víctimas del terrorismo y de supuestas torturas”.

En un comunicado, Covite exigió que la Ponencia de Memoria y Convivencia del Parlamento Vasco, en la que se va a depositar este estudio, “no dé por buenas” sus conclusiones. Además, el colectivo censuró que el gabinete de Urkullu “dedique todos sus esfuerzos en materia de memoria a apuntalar la teoría del conflicto”.

Por su parte, la eurodiputada de UPyD ,Maite Pagazaurtundua, cargó también contra el informe de torturas, que a su juicio “es un nuevo hito en el camino emprendido desde hace años” por el Ejecutivo vasco para “suavizar la historia criminal de ETA en aras de una falsa reconciliación”.

En términos similares, Maite Pagazaurtundua criticó que el consejero de Paz y Convivencia, Jonan Fernández, “ha demostrado, una vez más, que está en el puesto para maquillar la importancia del terrorismo”. En palabras de la eurodiputada de UPyD, Fernández “hace el trabajo de maquillaje” para Iñigo Urkullu, al que “le interesa dar una de cal y otra de arena sobre las décadas de persecución del mundo de ETA y su entorno contra los demócratas”. - M.A.