Bilbao - La juntera por Bizkaia y candidata a secretaria general de Podemos Euskadi, Asun Merinero, desveló ayer los ejes políticos y organizativos con los que aspira a liderar la formación morada a partir del 15 de diciembre. Además de invitar a recuperar “la autenticidad perdida” con una marca “propia” alejada de las dinámicas del resto de partidos, Merinero se desmarcó de los sectores mayoritarios en liza en las primarias al aseverar que no es partidaria de alianzas con EH Bildu, ya que por un lado “le queda un largo camino que hacer en cómo gestiona la pluralidad de este país, en paz y convivencia” y, por el otro, su tema central gira en torno a la independencia y la visión de su partido “debe ser la defensa de los derechos sociales y las desigualdades”.

Los planteamientos políticos de Lander Martínez -de la candidatura continuista Guztiok Bat- y María Valiente -de la crítica Denontzat- establecen la posibilidad de aliarse con sectores progresistas para formar una alternativa de cara a 2020, incluido EH Bildu. Merinero, que no cuenta con una plancha completa que la sustente en las primarias, no contempla esa alianza. “Podemos compartir que el derecho a decidir lo debería tener la sociedad vasca, pero ahí tenemos diferentes propuestas. La vía unilateral catalana no ha servido para nada. Hay muchas diferencias entre Podemos y EH Bildu, ya que ellos también forman parte en algún sentido de la vieja política”, zanjó.

La candidata desecha además las etiquetas colocadas a las tres corrientes mayoritarias que a buen seguro se repartirán la mayoría de las 34 sillas del Consejo Autonómico de Euskadi para un partido que debe recuperar el pulso tras dos elecciones generales en las que venció en la CAV pero que no refrendó esa posición de cabecera en las urnas autonómicas de hace poco más de un año. “Se debe elegir a los mejores y valorar para qué es una dirección política, qué queremos aportar a la sociedad vasca y cuál es el centro de las propuestas de cambio”, para edificar una nueva dirección de Podemos Euskadi en “conexión con la ciudadanía vasca”.

Tras reconocer que ha apoyado a Pablo Iglesias, la aspirante a liderar Podemos Euskadi censuró las formas en la salida de Nagua Alba de la dirección vasca. A su juicio la dimisión de Alba estaría encuadrada en una “estrategia” y en el hecho de que “no tenía interés” en seguir por razones “que no le he oído explicar de manera lógica”. “No tenía que haberse producido este relevo en diciembre en un momento en que se negocian los presupuestos de las instituciones... Nos ha pillado de sorpresa y ese era el efecto que se buscaba”, reconoció. - DNA