BARCELONA - El expresident de la Generalitat, Artur Mas, admitió ayer que la financiación y la cuestión fiscal son los dos grandes motores que han impulsado el proceso soberanista en Catalunya hasta la fecha. Y lo hizo comparando la situación de Euskadi con la de la comunidad que presidió, que se encuentra en clara desventaja en materia presupuestaria, según su parecer. “Una gran diferencia que no se puede obviar nunca -aseguró- es que las relaciones vascas con el Estado español son unas relaciones donde el País Vasco, desde un punto de vista financiero y fiscal, es un país casi independiente”, dijo.

En una entrevista en Radio Euskadi, el dirigente del PDeCAT lamentó que el caso de Catalunya “es absolutamente distinto, es un país absolutamente dependiente”. “Comparada con la que pueda tener el País Vasco, no tiene nada que ver. Y ésta es una diferencia sustancial para entender también la evolución” de ambas sociedades. El acuerdo sobre el Cupo y el Concierto Económico en Euskadi marca esa diferencia, y el anhelo de alcanzar ese grado de autonomía está en gran medida detrás de la escalada soberanista de los últimos años en Catalunya.

Sin embargo, Artur Mas aclaró que el tema fiscal y financiero “no es el único que impulsa el proceso soberanista catalán”, cuya situación definió como “mucho más compleja”. Así, apuntó que en el caso catalán, “además del tema fiscal y financiero, que evidentemente existe, hay otros muchos factores de tipo cultural, de proyecto de futuro, de relaciones internacionales, de ejercicio de las competencias y de capacidad de decisión que pesan mucho en este proceso soberanista”. Agregó que “si en Catalunya se ha llegado a algún acto de tipo unilateral es porque no ha habido manera de sentarse a la mesa y de dialogar francamente con las instituciones del Estado”.

Acumular fuerzas El exlíder de la extinta CDC se refirió además a las elecciones del 21 de diciembre en Catalunya asegurando que esa cita con las urnas marcará “si hay mayoría suficiente” para continuar con el proyecto de independencia. Mas se refirió a las recientes declaraciones de dirigentes soberanistas en las que aseguraban que el Govern no estaba preparado para implementar la independencia, y admitió que “nunca se está del todo preparado para empezar a funcionar como país independiente”. “De lo que se trata es de tener la fuerza democrática y alianzas suficientes para llegar a funcionar como país independiente”, señaló.

Explicó que “un día se puede ganar la independencia en referéndum”, como, a su juicio, ocurrió el pasado 1 de octubre. “Pero el día en el que tú ganas la independencia no te conviertes, de facto, en un estado independiente. La independencia hay que construirla”, apostilló en la entrevista radiofónica. Según su opinión, actualmente se está “en esa fase de acumular fuerzas y ganar alianzas para ver si realmente el 21 de diciembre se confirma que, a través de la votación popular, una vez más, hay una mayoría suficiente para continuar este proyecto”.