barcelona - El president de la Generalitat, Carles Puigdemont, advirtió ayer al Estado español de que Catalunya votará sobre la independencia “le guste o no”. “Lo siento, España. Catalunya votará sobre la independencia le guste o no”, tituló un artículo de opinión publicado en el periódico estadounidense The Washington Post, en el que explica el resultado de las últimas elecciones catalanas y asegura que no se puede negar la legitimidad democrática del Govern.

“Por esta razón, después de hacer muchos esfuerzos sin éxito para acordar los términos del referéndum con el presidente de España, Mariano Rajoy, inicié el referéndum”, señala el jefe del Ejecutivo catalán, que contrasta la posición de Moncloa con la de países como Canadá y Reino Unido. “Madrid ha rechazado aceptar este reto democrático y ha optado por el camino de la represión autoritaria”, lamenta, y reprocha que las fuerzas de seguridad españolas están confiscando papeletas y urnas, arrancando pancartas e “intimidando ciudadanos”.

Asimismo, Puigdemont acusó al Gobierno de Mariano Rajoy de ser irresponsable por perseguir el referéndum en un momento de alerta por el terrorismo yihadista. “En vez de trabajar para prevenir posibles ataques, las fuerzas policiales españolas están trabajando para prevenir el ejercicio de la democracia. Esto es profundamente irresponsable”, aseveró. “Este estado de asedio de facto al que España ha sometido a Catalunya anula la autonomía concedida en 1979”, agregó.

El president añadió que “cuatro décadas después de la muerte del dictador Francisco Franco, todavía vemos que los instintos autoritarios gobiernan el corazón del Gobierno de Madrid”, y concluyó que el compromiso del Ejecutivo que preside con el derecho a la autodeterminación permanece inalterable pese a la represión del Estado.

Clima de acoso Estas palabras tuvieron ayer su contrapunto en la vicepresidenta del Gobierno español, Soraya Sáenz de Santamaría, que acusó a Carles Puigdemont de propiciar un clima de “acoso masivo” y le preguntó: “¿Hasta cuándo va a seguir abusando y tensionando al pueblo de Cataluña?”. En declaraciones previas a una conferencia del presidente de UPN, Javier Esparza, también respondió al plan de contingencia anunciado en la noche del jueves por el president y dijo que “en eso se ha quedado el referéndum, en un plan de contingencia”.

Sáenz de Santamaría subrayó que el pueblo de Catalunya, al que apela el president de la Generalitat, también son los jueces, los medios de comunicación, los padres y niños “que acarrean a las manifestaciones”, los propios guardias civiles que realizan registros por orden judicial o los miembros del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya. “Que deje de atropellar los derechos de su pueblo”, zanjó.

En esta cuestión también terció el PSOE, cuya secretaria de Igualdad, Carmen Calvo, pidió al president de la Generalitat que desconvoque el referéndum del 1-O para no llevar al “precipicio” a Catalunya y porque es “la única posibilidad razonable” que existe en este momento. En declaraciones a TVE, reprochó a Puigdemont “la contradicción” de que el PDeCAT votase a favor de crear una comisión parlamentaria sobre el modelo territorial que ha impulsado el PSOE y que, a la vez, lleve a Catalunya al “precipicio”. - DNA