BILBAO - Miles de personas recorrieron ayer las calles de Bilbao para solidarizarse con el proceso soberanista catalán y respaldar la convocatoria del referéndum. Gure Esku Dago, convocante de la manifestación, mostró su “firme apoyo” al pueblo de Catalunya y reivindicar “una democracia donde podamos decidir libremente nuestro futuro”. A dos semanas del 1-O, la marcha contó con una gran representación de organizaciones y partidos políticos vascos. El PNV quiso despejar dudas respecto a su compromiso con el procés y envió una nutrida comitiva encabezada por los burukides Itxaso Atutxa, Joseba Egibar y José Antonio Suso; los tres diputados generales, Unai Rementeria, Markel Olano y Ramiro González; y el alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto. Por parte de EH Bildu, acudieron numerosos dirigentes como Arnaldo Otegi, Jasone Agirre, Arkaitz Rodríguez, Pello Urizar o Jone Goirizelaia.
La manifestación, menos concurrida que otras convocatorias de Gure Esku Dago, partió de la plaza de La Casilla y recorrió las arterias de la capital vizcaína para, en palabras de los organizadores, mostrar un “compromiso con la libertad de expresión” y “rechazar la respuesta del Estado español” a la celebración del 1-O. Los convocantes y varios representantes de la sociedad civil portaron la pancarta con el lema Democracia, votar para decidir. Entre ellos estaban los portavoces de Gure Esku Dago, Angel Oiarbide y Zelai Nikolas; el exrector de la UPV/EHU, Iñaki Goirizelaia; la sindicalista agraria Maite Aristegi; y el exdirigente de CCOO, Jesús Uzkudun.
Minutos antes de la marcha los representantes de partidos y organizaciones sindicales mostraron su apoyo al pueblo catalán y su deseo de que el 1-O salga adelante. La presidenta del BBB, Itxaso Atutxa, aseguró que Catalunya “es una nación y tiene derechos políticos”, por lo que debe “decidir su futuro con libertad”. Así, cree que el referéndum es “una salida democrática y pacífica que también puede servir para Euskal Herria”. La dirigente jeltzale denunció asimismo “las prohibiciones y amenazas” del Gobierno español, que “vulnera los derechos” de los catalanes en lugar de permitir una votación con garantías. “Lamentamos profundamente que el Gobierno español, en lugar de garantizar lo que el pueblo catalán demanda en libertad y de manera democrática, esté torpedeando e impidiendo por la fuerza su decisión y su voluntad”, expresó.
“UN ESTADO ATRASADO” EH Bildu, por su parte, celebró que Bilbao “se llena de personas que quieren demostrar que están a favor de la democracia, a favor de un derecho tan básico como es el derecho a poder decidir”. En palabras de la parlamentaria Jasone Agirre, España está demostrando una “actitud antidemocrática” ante el 1-O. “El Estado español no es democrático, no es un Estado avanzado, es un Estado atrasado que no está al nivel de otros europeos, como está demostrando estos días con su actitud hacia Catalunya. Está persiguiendo, amenazando al pueblo catalán y a sus representantes”, explicó. Además, Agirre opina que el procés se puede trasladar a Euskadi: “Aquí hay una mayoría social y política que está por el derecho a decidir, se dan las condiciones para recorrer un camino parecido al catalán”.
La marcha concluyó frente al Ayuntamiento de Bilbao, donde Gure Esku Dago leyó un comunicado en el que celebró que Euskadi es “un pueblo solidario y que esa solidaridad es parte de nuestra identidad”. En este sentido, la organización convocante cree que “no es el momento de quedarse mirando” a Catalunya, sino “el momento para comenzar a andar juntos, trabajar generando cofianzas mutuas y ser creativos”. Finalmente, los asistentes escucharon un mensaje de la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, que agradeció el apoyo y denunció que “no hay democracia en un Estado que persigue penalmente el debate de las ideas y obliga a los pueblos que forman parte de él a estar en este Estado”.