barcelona - La diputada de la CUP en el Parlament, Anna Gabriel, sostuvo ayer que la responsabilidad de que los catalanes puedan votar en el referéndum del 1-O recae exclusivamente en el Govern de Puigdemont. “Esto va de quién aguanta un segundo más, y lo tenemos que aguantar nosotros”, valoró sobre las semanas próximas en las instituciones catalanas y las estatales mantendrán un “pulso”.

Puesta en marcha la ley del referéndum, según los cuperos la nueva fase abierta para garantizar el voto, tal y como el Ejecutivo Puigdemont les ha transmitido, queda en manos del Govern. “Hemos hecho todo lo que podíamos hacer y más para llegar a donde hemos llegado”, apuntó, y recordó que su responsabilidad como grupo parlamentario era aprobar las leyes de desconexión. El objetivo está cumplido, toda vez de que se firmara el decreto de convocatoria para el 1-O.

Además, explicó que la CUP quiso ir más allá en su compromiso con el referéndum y trabajaron intensamente en la logística de la consulta y en las medidas que se debían adoptar ante las “imposiciones” del Estado, pese que no les correspondía por no formar parte del Ejecutivo. Gabriel concretó que la formación antisistema estuvo trabajando en las contramedidas desde la aprobación de los Presupuestos de 2017 en marzo. “Esto quiere decir, que planteamos hasta qué haríamos, por ejemplo, cuando hubiera una directriz que afecte a empresas privadas que pongan en riesgo el suministro de aquellos elementos necesarios para hacer el referéndum”.

recomendaciones Gabriel aseguró que hicieron llegar al Ejecutivo de Puigdemont todas las consideraciones, propuestas, recomendaciones, ideas y estrategias necesarias “en base a este escenario que está sucediendo”, pero que el Govern les dijo que como grupo parlamentario no les correspondía esa tarea. “No estamos en la reunión logística del referéndum porque no nos quieren allí”, abundó.

“Si llegase el momento en que nos dijeran que colapsamos porque no se ha podido garantizar la logística, nosotros podremos demostrar que habíamos advertido de que esto podía suceder y que habíamos puesto sobre la mesa propuestas para desbordar todas las prohibiciones y todos los impedimentos”. Gabriel recordó “el famoso referéndum o referéndum” pronunciado por Puigdemont en octubre de 2016 para recordar al president que “sólo queda una cosa por hacer: no esperar a que el Govern haga, sino exigir que el Govern ejecute”. - E. P.