BILBAO - La agresión en el recinto festivo de Bilbao a un miembro de EGI, las juventudes del PNV, el pasado domingo supuestamente por personas “del entorno de la izquierda abertzale”, suscitó ayer el rechazo del grupo municipal de EH Bildu en la capital vizcaína. En palabras de su concejal, Alba Fatuarte, la coalición rechaza “cualquier tipo de acto violento”.

Según denunció el lunes la organización juvenil del PNV, la agresión sufrida por uno de sus afiliados se produjo durante la última jornada de la Aste Nagusia bilbaína “por motivos políticos” en la zona de la txosna de Kaskagorri. El joven tuvo que ser atendido en un centro sanitario de una herida junto a la oreja, en la que se le aplicaron varios puntos de sutura, y de un golpe en un ojo, tras ser increpado por un joven y atacado por un grupo de “diez o doce” personas. El amigo que lo acompañaba también recibió un golpe que le partió el labio.

Antes estos hechos, la concejal de la coalición abertzale expresó ayer que su grupo “rechaza cualquier tipo de acto violento” a pesar de “la escasa información” que tiene contrastada. Pero, por otra parte, Alba Fatuarte demandó que no se “señale” o “estigmatice” a Kaskagorri, ya que a su juicio esta comparsa “trabaja todo el año para que el espacio festivo esté libre de cualquier tipo de agresiones”. Además, la edil recordó que no es el único elemento negativo de las fiestas, ya que también se produjo un “ataque contra la crítica sociopolítica y la libertad de expresión” en el caso de la comparsa Hontzak, de la que la Ertzaintza retiró parte de su decoración tras una denuncia del Obispado de Bilbao por considerarla blasfema.

Por su parte, el Consejo de la Juventud de Euskadi también “lamentó” la agresión sufrida por el miembro de las juventudes del PNV y aprovechó para posicionarse “en contra de la violencia en cualquier de sus formas”. En un comunicado que difundió ayer, afirma que “un ataque hacia la ideología es un ataque hacia la identidad personal y, en consecuencia, hacia la libertad para ser quienes somos y quienes queremos ser”. En el documento, el organismo defiende asimismo que, “si queremos construir la convivencia entre todos, se debe abandonar este tipo de acciones de manera definitiva”.

KASKAGORRI NIEGA SU IMPLICACIÓN La comparsa junto a la que supuestamente se produjo la agresión negó ayer en un comunicado que sus miembros participaran en los hechos y acusó a las juventudes del PNV de “difundir una mentira” para “ensuciar la imagen” de Kaskagorri. Además, el texto asegura que los voluntarios presentes en la barra de la txosnas a la hora del ataque no presenciaron ningún altercado, por lo que ponen “en duda” que se produjera en la zona trasera del Teatro Arriaga. Finalmente, la comparsa lamenta que “nadie” les haya preguntado sobre el asunto y se hayan tenido que enterar por la prensa. - M.Aizpuru