MADRID - El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, se refirió ayer al reciente pacto suscrito entre el gobierno socialista de Castilla-La Mancha y la formación morada, por el cual Emiliano García-Page ha ofrecido dos sillones en el ejecutivo a su partido, rechazando que esta maniobra pueda servir de “laboratorio” a un posible acercamiento entre ambas fuerzas a nivel estatal.

Según dijo, Podemos aspira a gobernar en el Estado, pero este acuerdo “no es un ensayo de nada”. Este acercamiento entre las dos fuerzas a nivel autonómico se produce mientras buscan una acción conjunta en el Congreso de los Diputados para hacer irrespirable la legislatura a Mariano Rajoy. La moción de censura contra el presidente español está descartada de momento, porque los socialistas no ven mimbres. El partido morado sí querría intentarla y, de momento, se está produciendo un importante deshielo entre los dos partidos. A preguntas de los medios tras participar en Carranque (Toledo) en el Consejo Ciudadano Estatal de su partido, Iglesias dijo que la posible entrada en el gobierno castellano-manchego puede servir para que el PSOE “pierda la tentación de gobernar con el PP”. - E.P.