BILBAO - Francisco Samir Lahdou y Conchi García, los dos concejales de Ganemos Goazen Bilbao en el Ayuntamiento, presentaron ayer su renuncia como miembros del Consejo Ciudadano de Podemos Euskadi en la capital vizcaína. En una carta remitida al secretario general estatal del partido, Pablo Iglesias, ambos ediles critican que la formación morada se ha convertido en “una organización que está más cerca de la casta política tradicional que de un movimiento ilusionante y combativo”. La misiva, apoyada por más de una veintena de inscritos, tilda la actitud de la dirección del partido en la CAV como “elitista” y señala especialmente a su responsable de Organización, Lander Martínez, actual parlamentario en Gasteiz y que anteriormente fue el máximo dirigente de la formación en Bilbao.

La renuncia de los dos concejales bilbaínos a sus puestos orgánicos es el desenlace de la maltrecha relación que han mantenido con los dirigentes de Podemos Euskadi, proclives a las tesis de Iñigo Errejón. El enfrentamiento se inició en las elecciones municipales de 2015, cuando el partido apostó por no estampar su nomenclatura en las papeletas para favorecer el acercamiento de otras formaciones de izquierdas. En suelo vasco, la formación morada ató coaliciones locales con partidos como Ezker Anitza o Equo y obtuvo representación en numerosos municipios.

El impulso del entonces secretario general de Podemos en Bilbao, Lander Martínez, para lograr esa unión no fue bien recibido entre algunos sectores de la militancia. Denunciaban que estaba intentando conformar una lista “a espaldas de las bases” pese a que era esa la directriz emitida desde Madrid. La disconformidad llegó a tal punto que acabó en una suerte de escisión. Así, dos candidaturas al Ayuntamiento trataron de adjudicarse el ADN del partido: Udalberri-Bilbao en Común, que integró a representantes de Ezker Anitza y Equo; y Ganemos Goazen Bilbao, con aspirantes procedentes únicamente de Podemos.

Ambas planchas lograron dos actas de concejal. Si hubieran concurrido juntas, habrían obtenido al menos cuatro, como el resto de grupos de la oposición -EH Bildu, PSE y PP-. Desde entonces, Lahdou y García han mantenido una línea política similar a la de Udalberri, pero a la vez se han enfrentado a un procedimiento de expulsión disciplinaria por parte de la Comisión de Garantías que fue ralentizada con la interposición de un recurso. Según respondió ayer Podemos Bilbao en un comunicado, su renuncia es una mera “maniobra” para adelantarse a la “inminente” ejecución de su cese.

Los firmantes de la carta, muchos de ellos considerados como cercanos al excoordinador general de Ezker Batua Javier Madrazo, reprochan ahora que la dirección de Podemos Euskadi haya puesto en marcha mecanismos poco transparentes. “Informan de propuestas a hechos consumados y el sistema de votación telemático es puro pucherazo”, manifiestan. En ese mismo sentido, plantean una brecha entre los dirigentes y los inscritos: “Solo les interesan las bases como masa aborregada a la hora de votar o de hacer bulto en actos, pero no para representar a un municipio o a un territorio en las instituciones”.