Barcelona -El exconseller y diputado de JxSí en el Parlament Germà Gordó anunció ayer que deja el PDeCAT tras 37 años de militancia y seguirá como diputado no adscrito en el Parlament tras saberse que el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) le investiga por su supuesta participación en la trama del presunto cobro de comisiones ilegales en CDC. A través de un comunicado, Gordó anunciaba su decisión. “Causo baja del nuevo partido PDeCAT, y evidentemente del grupo parlamentario JxSí, y permaneceré como diputado no adscrito, en el sentido que me ha pedido la plataforma Nova Convergència y tras haberlo hablado con algunos dirigentes del partido y algunos compañeros de escaño”, aseguró. Según Gordó, la decisión, “además de poner final al conflicto referido con la dirección del PDeCAT, es una declaración de intenciones políticas” y supone una puerta abierta al futuro de la política catalana para aportar ideas y principios que, a su juicio, están huérfanas de representación.
Tras la postura adoptada por Gordó, hubo unanimidad en las fuerzas parlamentarias al perdirle que deje su acta de diputado. Así se expresaron desde ERC al PP, pasando por el hasta ayer su propio partido, el PDeCAT, o SíQueEsPot.
El Govern catalán también reclamó al exconseller que sea consecuente y renuncie a su acta parlamentaria. La portavoz Neus Munté subrayó que el Govern suscribe “plenamente” la exigencia de Junts pel Sí de que entregue el acta del Parlament. A partir de ahí, añadió que “cada decisión es personal y cada uno debe gestionar su ética personal como considere más oportuno”. - Efe