si EH Bildu atiende a las enmiendas que el sector oficialista y el crítico de EA transaccionaron ayer con un apoyo del 76%, la coalición deberá reajustar varios planteamientos. Lo debería hacer tanto en lo referente al papel de los partidos como al funcionamiento de una coalición en la que EA dio luz verde, como había propuesto la dirección liderada por Pello Urizar, a la creación de la figura del militante propio. EA define a EH Bildu, por la que apuesta de forma “inequívoca”, como una “coalición de partidos abierta, que respete las dinámicas y procesos de toma de decisiones propios de los partidos y habilite estructuras de participación y decisión” tanto a miembros de cada formación como a los cargos independientes.
Los partidos centrarán su actividad en la coalición, pero al igual que el espacio que se reservó Sortu en su última redacción estatutaria, ese camino común se desarrollará “con respeto al protagonismo político propio para que su trabajo, trayectoria y acervo sean incorporados de forma nítida y en forma de suma a la síntesis que supone la coalición”, en los términos que hace una semana usó Carlos Garaikoetxea.
En las cinco páginas de la ponencia política que la organización facilitó a la prensa, EA reconoce con base en su historia el “riesgo” de las coaliciones hacia la “identificación y confusión con una fuerza”, un temor verbalizado en público por el sector liderado por Maiorga Ramírez. Como consecuencia, el partido que vuelve a liderar Urizar insta -en un texto por momentos genérico y sujeto a interpretaciones- a sumar “un amplio espectro” ideológico “rehuyendo de la imposición de modelos únicos de participación y toma de decisiones”.
A diferencia de la estructura de un partido clásico, EA propone que “para fijar la posición política en los diferentes ámbitos” EH Bildu cree “comisiones compuestas por miembros de los partidos y personas no adscritas”. Como complemento, la portavocía de la coalición deberá ser “coral, en la que se visualice la pluralidad” de la misma.
En un escenario en el que EH Bildu reflexiona acerca de cómo superar sus órganos de coordinación actuales, EA opta por “estructuras comunes indispensables”, “órganos comunes imprescindibles”, “estructuras organizativas básicas para una acción y coordinación eficaces” y “órganos imprescindibles de administración y gobierno”. Cuatro expresiones sinónimas en apenas cinco páginas para una estructura similar a la actual frente a una ejecutiva clásica a cuyo mando se situaría la figura de coordinador que “asumirá la responsabilidad de dirigir estos órganos”.
Uno de los objetivos es garantizar “la visualización de la pluralidad existente en la coalición”, para lo que EA propondrá “cuotas que aseguren la presencia equilibrada” y modelos “rotatorios de ostentación de responsabilidades”.
Militancia propia Con un respaldo del 76% y un 20% de los votos en contra, EA acepta una de las principales novedades de EH Bildu: la figura del militante como manera de dar cabida estructurada a los independientes. Lo hace, además, permitiendo elegir entre ellos a “una persona que pasará a engrosar la Mesa de Partidos”.
Si los críticos habían mostrado su reparo a que los ya afiliados a cualquiera de los cuatro partidos tuvieran que afiliarse a su vez a EH Bildu para participar en la vida de la coalición, EA propone que estas personas tengan “todos los derechos reconocidos” si están ya afiliadas a una formación que integre la coalición. Una vez se sepa cuántos afiliados tienen los partidos y cuántos independientes se han sumado, EA pide acordar “el porcentaje de cuota de presencia que les correspondería en las listas y responsabilidades internas” en procesos como la designación de cabezas de lista o ratificación de acuerdos electorales que quieren someter a votación universal de las bases.
De puertas para adentro, la ponencia aprueba la implantación de un sistema de primarias para la Secretaría General -que se aplicará en la próxima elección, una vez se desarrolle el reglamento- y recoge la denuncia de los críticos, rechazada por el sector oficialista, que se habían sentido desplazados por los plazos de EH Bildu para su proceso, similares a los de EA: “Los órganos de decisión de EA serán convocados con anterioridad a la celebración de los foros de EH Bildu y los representantes de EA deberán posicionarse en el sentido de las decisiones adoptadas en el partido”.
