bilbao - Aunque no lo expresó de una forma explícita, Unai Ortuzar, exconcejal del PSE de Lemoa, quiere convertirse en el Pedro Sánchez de Euskadi. Acompañado de un puñado de militantes agrupados en la plataforma Berritu Sozialistak, anunció ayer de forma pública su intención de competir con Idoia Mendia por la secretaría general del PSE, aunque para ello deberá recoger los 528 avales necesarios para oficializar su candidatura, algo que reconoció que será complicado.
Según afirmó, durante las últimas semanas este grupo de militantes ha trabajado a favor de la candidatura de Pedro Sánchez en las primarias del PSOE y, con la victoria de éste, se ha trasladado a la sociedad que en Euskadi “también se tiene que cambiar”. Pese a que hizo suyo el programa con el que compitió Sánchez y que será el que lleve al Congreso Federal, Ortuzar negó que cuente con el apoyo explícito del secretario general. Es más, aseguró que el líder del PSOE no debe decantarse por nadie. “Pedro es el secretario general de todos y apoya a todos. Si me diera explícitamente su apoyo, generaría una bronca muy seria a Idoia Mendia”, afirmó.
Lo cierto es que el sector sanchista en Euskadi se ha desmarcado de Ortuzar, que ayer denunció como “pasteleo” el acuerdo alcanzado por los partidarios de Sánchez y de Patxi López para confeccionar la lista que representará al PSE en el Congreso Federal. “Nuestra línea no es la del pasteleo de listas. No es entendible que, tras la bronca de tres meses, ahora todas vayan en una única lista”, señaló, al tiempo que tienen intención de, por lo menos en Bizkaia, presentar su propia lista al congresillo. Sobre al pacto de gobierno PNV-PSE, Ortuzar lo considera un “acuerdo de Estado”, por lo que debe trasladarse a la militancia. Por ello, afirmó que, en caso de ser secretario general, si los militantes socialistas deciden que “hay que romper, yo me debo a ellos”. “Lo sometería a una consulta a la militancia...”, señaló, para reconocer que, nivel personal, cree que se está ante un acuerdo que no beneficia a los socialistas sino que “nos resta”. “El mantener figuras del pasado o estrategias del pasado produce desgaste. A nuestro votante le chirría el pacto y no levantamos cabeza desde 2009”, zanjó.
