madrid - A falta de dos días para que los militantes del PSOE elijan a su nuevo secretario general, Pedro Sánchez afirmó ayer que si resulta ganador de esta contienda “tenderá la mano” a las candidaturas de Susana Díaz y Patxi López para que se integren en la Ejecutiva del partido. Un ofrecimiento a las candidaturas, que no a las personas, habida cuenta de la animadversión que se tienen Díaz y él, y al hecho de que el tercero en discordia, Patxi López, otrora fiel aliado suyo, a medida que ha avanzado la campaña de primarias se ha ido alineando junto a la andaluza, según denunciaron miembros de la candidatura del exlíder del PSOE.
Sin embargo, y pese a esta mano tendida, Sánchez quiso dejar clara la distinta versión de partido que ofrece su propuesta con respecto a Susana Díaz -“uno es el PSOE de la militancia y no el PSOE de los notables”, señaló-, por lo que considera lógicos los cambios en la dirección del partido. “Si estamos a las puertas de un nuevo PSOE, debe haber renovación tanto en la Ejecutiva como en los cargos y las caras que han liderado el partido en los últimos meses”, anunció.
El primero de los cambios adelantados será el del portavoz del grupo parlamentario, Antonio Hernando, que no seguirá en el cargo si él es el vencedor. El cese de Hernando no sería el único cambio en la bancada socialista en el Congreso a tenor de las palabras de ayer de Pedro Sánchez, que aseguró que no se reconoce en un grupo parlamentario que “bloquea la comparecencia de Mariano Rajoy para explicar los casos de corrupción que afectan al PP”. Por ello, insistió en que, a su juicio, las decisiones que está tomando el grupo socialista “no son las adecuadas”.
Asimismo, Sánchez afirmó tajante que no va a alentar movimientos desestabilizadores en las federaciones cuyos líderes se han alineado con Díaz, -Ximo Puig (Valencia), García-Page (Castilla La Mancha) o Fernández Vara (Extremadura), entre otros- , pero espera que todos ellos acepten el resultado y sean leales al nuevo secretario general.
Sánchez se refirió también al programa presentado un día antes por Susana Díaz, un proyecto que a su entender supone una “involución en la participación democrática”, hasta el punto de mostrar su temor por el hecho de que la presidenta andaluza quiera acabar con las primarias para elegir líder.
Según señaló, el “programa ambiguo” presentado por la presidenta andaluza se presta a muchas interpretaciones. “Cuando habla de plantear consultar a la militancia sobre las consultas y sobre las primarias a la Secretaria General, lo que hace es dejar abierta la puerta con un texto muy ambiguo a muchas cosas, que pueden ser a favor o en contra”, afirmó Sánchez, quien recordó que eso es algo que está resuelto en el PSOE puesto que “los Estatutos dicen que la elección será por voto directo de los militantes”.
Ir a la guerra Por otro lado, el PP considera que una victoria de Pedro Sánchez en las primarias del PSOE del domingo diluiría las opciones de lograr acuerdos puntuales, aunque indica que, si es Susana Díaz la que alcanza el liderazgo, llegar a un posible entendimiento se haría también “muy difícil”, informa Efe.
En diferentes conversaciones informales en los pasillos del Congreso, muchos diputados del PP reflexionaban con periodistas sobre los escenarios que pueden abrirse a partir del fin de semana, en función de si gana Pedro Sánchez o Susana Díaz. Ven muy remotas las opciones de Patxi López. La dirección del partido considera que el triunfo de Sánchez alejaría aún más al PSOE de un posible entendimiento. “Él no quiere saber nada de nosotros”, sostienen las fuentes, para las que tampoco es descartable que presente una moción de censura. En principio, dichas fuentes creen que Sánchez no se sumará a la moción que ha anunciado el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, pero se muestran cautas sobre lo que pueda hacer a medio plazo.