MADRID - El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, remitió ayer un escrito al tribunal que juzga la primera época de actividades de la trama Gürtel (1999-2005) en el que solicita que su declaración como testigo en este procedimiento se realice por videoconferencia. Además, señala los días 26 y 27 del próximo mes de julio como los más adecuados para este trámite en función de su agenda de actividades. Esto supone demorar su declaración hasta el periodo vacacional del verano, con el Congreso de los Diputados ya sin actividad plenaria y con buena parte de los ciudadanos menos pendientes de la actualidad política. Si el tribunal acepta sus peticiones en los términos planteados por Rajoy, el presidente español conseguirá minimizar el impacto público de su comparecencia, puesto que no habría paseíllo hasta el tribunal y prestaría declaración en verano.
Rajoy justifica su propuesta en “razones de seguridad” y por ser el medio “menos gravoso”. “Un eventual desplazamiento del presidente del Gobierno ante la sede física del tribunal, o bien una posible constitución de este en el despacho oficial del presidente, supondría todo un conjunto de medidas de seguridad ciertamente desproporcionadas si tenemos en cuenta que la prueba podría practicarse a través un medio menos gravoso como es la videoconferencia”, se argumenta en el escrito. El texto añade que, debido a su “intensa actividad, con numerosos actos y reuniones previstas tanto dentro como fuera de España”, este medio es el “más idóneo y menos perturbador” para las funciones y responsabilidades que desempeña. Además, indica que la comparecencia física ante el tribunal implicaría un “despliegue importante de recursos públicos”.
La petición para que el testimonio no sea presencial sino mediante una videoconferencia desde Moncloa, que podrá verse en la sala de juicio, fue también defendida por escrito el pasado día 10 por el Partido Popular, acusado en este juicio como partícipe a título lucrativo. La declaración por videoconferencia está prevista en el artículo 229.3 de la Ley Orgánica del Poder Judicial y, de manera específica para el proceso penal, en el artículo 731 bis de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, que dice concretamente que “el tribunal de oficio o a instancia de parte (...) podrá acordar que su actuación se realice a través de videoconferencia u otro sistema similar que permita la comunicación bidireccional y simultánea de la imagen y el sonido”.
Rajoy declara como testigo, lo que implica que no está imputado por ningún delito. Sin embargo, esta condición tiene sus inconvenientes, como que está obligado a decir la verdad (so pena de incurrir en un delito de falso testimonio) y a responder a todas las preguntas de todas las partes. Será interrogado por el conocimiento que pudiera haber tenido de las irregularidades por su papel al frente del partido. - DNA/E.P.