Gasteiz - Acudió al acto de desarme de ETA de Baiona. ¿Por qué?
-En el acto hubo una gran representación de la sociedad civil. Tanto es así que estuve con muchas personas que no tienen ningún tipo de afinidad con la izquierda abertzale. Compartí un momento importante que hubiera preferido que se hubiera dado hace 10, 20 o 30 años. Que ETA se desarme es importante, pero aún hay que desarmar muchas actitudes y comportamientos.
La meta es la disolución de ETA. ¿Debe darse cuanto antes o hay que respetar sus tiempos?
-Lo ideal es que la decisión fuese de ETA y que se disolviese. Si ese escenario no ocurre, todo acto que permita, favorezca o encauce la posibilidad de que se disuelva, y efectuada de forma discreta... No soy persona de teatro, me gusta la discreción. Considero que muchos de los logros en este ámbito se han conseguido mediante pactos discretos. Por tanto, me imagino que igual se están haciendo cosas. Espero que así sea. Lo ideal es que la disolución de ETA sea ya y que dejemos de lado toda una historia de dolor, sufrimiento y comportamientos que nunca se debían haber dado.
¿Aplicar una nueva política penitenciaria es clave para deshacer la situación de los presos?
-Lo que no tiene sentido es aplicar una política de excepcionalidad. Así no se avanza en la convivencia ni en la reconciliación. Hay que tener en cuenta un hecho: aquí se ha sufrido por muchos tipos de violencias, pero solo hay personas encarceladas por una violencia determinada. No sé si la tuvo alguna vez, pero la excepcionalidad no tiene sentido ahora. Se castiga también a los familiares de las personas presas.
El EPPK opta por salidas individuales para obtener beneficios penitenciarios. ¿Ven esa postura con buenos ojos?
-Cuando las cosas están estancadas no son solo por una decisión, sino que influyen otros muchos factores. Pero la decisión de que los presos se acojan a medidas individuales es acertada.
La Ley de Cupo sigue en boca de todos. ¿Cómo valoran las negociaciones entre PNV y PP?
-Acerca de las negociaciones poco se sabe, debería haber habido más transparencia. Lo que sí resulta bastante preocupante es que con los casos de corrupción que le llueven al PP, el PNV se haya doblegado ante un partido al que se le denomina como el más corrupto de Europa. Estamos a favor del Cupo, que es un derecho de los ciudadanos vascos; pero deberíamos de tener la información necesaria para realizar una valoración global más adecuada.
¿No es un poco incongruente criticar la negociación del Cupo en Euskadi para después votar a favor del mismo en Madrid?
-Mi mente está puesta en lo que acontece en Euskadi. Como todo, a veces existen contradicciones, pero lo que hagan en Madrid es algo que decidirán allí. Evidentemente, nos tendrán en cuenta.
¿Los cinco votos del PNV al Presupuesto de Rajoy justifican las contrapartidas para Euskadi?
-Es muy preocupante que se haya negociado el Cupo o se hayan aprobado unos Presupuestos Generales del Estado con un Gobierno español que cada vez está restringiendo más los derechos e imponiendo leyes como si estuviésemos en una dictadura. Y lo que no se puede es que en un Estado democrático de derecho se mermen derechos que entre todos tendríamos que consensuar y blindar.
¿Las movilizaciones de las juventudes de la izquierda abertzale ante las sedes del PNV o los ataques a los batzokis retrotraen a otros tiempos?
-Las formas y maneras no nos gustan. No defendemos esas actitudes, no las comprendemos. Sabemos lo que es que nos ataquen, yo personalmente, y desde todos los frentes, pero nunca he considerado reaccionar de forma violenta. Y, por supuesto, toda mi solidaridad a las personas atacadas.
La dirección de Podemos en Madrid prepara una moción de censura contra el PP. ¿Es favorable a acometer esa acción?
-Es un mecanismo que se puede utilizar, a pesar de todas las pegas que se le están poniendo. Aquí la pregunta importante debería ser si el PP merece estar actualmente en el gobierno con todos los casos de corrupción que le vienen salpicando y su consiguiente manipulación. Por tanto, más que criticarlo, lo que hay que hacer es actuar contra toda esa impunidad que el PP intenta llevar adelante a través de leyes.