Gasteiz - España y Francia firmaron ayer en Málaga el acuerdo por el que el Gobierno de François Hollande entregará al de Mariano Rajoy toda la documentación y objetos intervenidos a ETA en los últimos veinte años, una ingente cantidad de material que será utilizado por la Audiencia Nacional y la Fiscalía para investigar los más de 300 atentados que a día de hoy permanecen sin esclarecer.
Ambos mandatarios sellaron, en el marco de la XXV cumbre hispano-francesa, un acuerdo que, desde el punto de vista simbólico, certifica que Francia da por concluida la actividad de ETA. Por su parte, el Estado español analizará exhaustivamente documentos, armas y todo tipo de objetos con la idea de reabrir causas, el mismo objetivo que persigue cuando reclama a los presos del grupo armado que colaboren con la justicia para acceder a beneficios penitenciarios, precisamente el paso que el EPPK ha rechazado expresamente, junto con el arrepentimiento. El pasado mes de noviembre, la abogada de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) Carmen Ladrón de Guevara señalaba a este periódico cómo la remisión de dicha información desde Francia le iba permitir reforzar “algún sumario reabierto”.
La documentación que llegará al Estado español proviene de los casos instruidos por el Tribunal de Gran Instancia de París ya juzgados de forma definitiva, informa Efe, y su entrega fue ratificada ayer por los ministros de Justicia e Interior de los dos países. En todo caso, hace más de medio año que ambas administraciones cerraron un acuerdo trabajado en los últimos años y en cuya materialización se ha implicado personalmente la juez Laurence Le Vert, que dedicó los últimos meses de su carrera judicial a organizar toda la documentación.
Fue a finales del pasado mayo cuando el presidente del Tribunal de Gran Instancia de París, Jean Miguel Hayat, hizo entrega a las autoridades españolas de información detallada sobre el listado de efectos incautados a ETA, que una vez entregados a España y analizados por la Justicia se depositarán en el Memorial de las Víctimas del Terrorismo que está previsto que abra sus puertas en Gasteiz en 2018. En ese lugar se habilitará además una reconstrucción del zulo de Arrasate en el que estuvo secuestrado José Antonio Ortega Lara.
El archivo de ‘Antza’ Entre los cientos de miles de documentos que Francia remitirá a España, tanto en soporte papel como informático, figuran los correspondientes a la instrucción judicial de la operación que se saldó con la detención, en octubre de 2004 en una casa rural de Salies-de-Béarn, de los dirigentes de la banda Mikel Albisu, Antza; y de Soledad Iparragirre, Anboto.
En uno de los zulos descubiertos tras la detención del que fuera jefe del aparato político de ETA -un escondite denominado Txoriak y ubicado en el sótano de una vivienda de Saint Pierre d’Irube- la Policía halló el archivo que la propia organización había elaborado a lo largo de sus años de existencia, que recogía documentos escritos, sonoros y audiovisuales que se remontan a los primeros compases de la década de los años 70 del pasado siglo. Así, en las estanterías de dicho zulo había casetes con grabaciones de reuniones del Comité Ejecutivo de ETA, o de interrogatorios a secuestrados, como los empresarios José Lipperheide y Diego Prado y Colón de Carvajal. También se encontraron reportes de los autores de diferentes atentados a los máximos responsables de la banda.
Tal era la dimensión del archivo incautado y su relevancia para la organización armada que el propio Mikel Albisu reclamó, durante el juicio celebrado en el tribunal de París en 2010 y en el que se le condenó a veinte años de prisión, su devolución por constituir “un tesoro de incalculable valor”.
Los documentos. Francia entregará cientos de miles de documentos en papel, soporte informático, audio y vídeo incautados a ETA desde 1999, además de armas y diversos objetos.
El presidente del Gobierno español destacó ayer la colaboración policial mantenida por los dos estados a lo largo de los años.
El jefe del Estado francés aseguró que la documentación contribuirá a la memoria de la lucha contra el terrorismo.
2.500
Sellos judiciales incorpora la documentación incautada en 2004 en la operación que se saldó con la detención de Mikel Albisu, ‘Antza’, entonces jefe del aparato político de ETA.