MADRID - El PP cerró ayer su debate interno sobre la gestación subrogada con una enmienda por la que se compromete a recurrir primero a los expertos en la materia y escucharlos antes de decidir un posicionamiento político en nombre del partido. Este debate, uno de los que más división provocaba en el partido, se resolvió mediante una enmienda propuesta por el coordinador de la ponencia, Javier Maroto, que acordó con 21 enmendantes, entre ellos detractores y partidarios de la gestación subrogada.

El texto transaccionado salió finalmente adelante, según fuentes de los populares, por 699 votos a favor, veinte en contra y 66 abstenciones.

“No debemos ni queremos rehuir o ignorar ningún debate, ni rechazarlo o aceptarlo sin entrar en el fondo de la cuestión y sin el sosegado análisis necesario”, reza la transacción.

Por eso, ante este “nuevo debate” de la gestación subrogada, los populares admiten estar ante una realidad “muy delicada y extremadamente sensible” que requiere un “debate en profundidad, serio y sereno” tras el cual, tras escuchar a los expertos del ámbito jurídico y ético, permita construir un “posicionamiento” que cuente con un “amplio consenso”.

La enmienda se aprobó tras una discusión intensa en la que detractores y partidarios expusieron sus posiciones. Según aseguró el PP, fue un debate tranquilo y sin tensiones, en el que los enmendantes coincidieron en subrayar el diálogo que en todo momento ha habido sobre esta cuestión. - Efe