MADRID - El Gobierno del PP considera que cualquier reforma de la Constitución debe partir de dos premisas, saber cuál es el objetivo que se pretende con esa reforma y buscar un “gran consenso” para llevarla a cabo. Así respondió la vicepresidenta del Ejecutivo español, Soraya Sáenz de Santamaría, a dos interpelaciones que en este sentido le presentaron ayer en el Congreso de los diputados Podemos y el PSOE. Desde la formación morada su número dos, Iñigo Errejón, preguntó en concreto si el Ejecutivo de Rajoy tenía previsto “ensanchar y actualizar” la Carta Magna, que el próximo 6 de diciembre cumplirá 38 años. Por parte del PSOE, fue la diputada catalana Meritxell Batet quien ofreció el apoyo de los socialistas para reformar la Constitución y, de este modo, encontrar “cauces políticos” para desactivar lo que calificó como “problema catalán”.

En ambos casos, tanto a Podemos como al PSOE, la respuesta de Sáenz de Santamaría transcurrió por los mismos parámetros. Así, ante la propuesta socialista, la vicepresidenta dejó claro que una reforma constitucional “exige consenso en el punto de salida y de llegada y ponerse de acuerdo en el diagnóstico de los problemas y las soluciones”. A su juicio, en la Cámara baja hay diferentes puntos de vista sobre esa reforma. “El éxito de la Constitución de 1978 fue que siendo un producto de todos servía para dar cobijo a todos y eso es lo que tenemos que buscar porque se llama concordia”, respondió a la diputada catalana.

Sáenz de Santamaría se mostró mucho más beligerante con Errejón, a quien echó en cara sus diferencias con Pablo Iglesias en el seno de Podemos. “Vengan de casa consensuados” le espetó, antes de recordarle que las dos reformas que ha sufrido la Constitución fueron como origen de iniciativas parlamentarias y no gubernamentales. Por eso, la vicepresidenta retó a Errejón a que presente en el Congreso la reforma constitucional que pretende Podemos. Sin embargo, y de la misma manera, afirmó que dentro de la formación morada “hay unos que quieren cambiar la forma del Estado y otros que buscan estrechar derechos”.

Por su parte, Batet afirmó que el PSOE plantea la reforma constitucional para “construir juntos un proyecto ilusionante”, por lo que la diputada catalana pidió al Gobierno del PP que deje de “parapetarse detrás de la Constitución y de la ley utilizándolas para hacer política”.

Plante de Podemos Errejón, por su parte, aseguró que el próximo día 6 volverán a evidenciarse dos posturas, por un lado “los que se proclaman constitucionalista que acudirán de traje al Congreso” y por otro, los que “como Podemos, defenderemos ensanchar la Carta Magna en contraposición al PP, que con sus políticas han contribuido a estrecharla”.

En este sentido, la formación morada confirmó ayer que Pablo Iglesias e Iñigo Errejón no participarán en el acto que celebrará el Congreso con motivo del Día de la Constitución. Sus representantes serán el secretario de Organización, Pablo Echenique, y la secretaria de Análisis Político y Social, Carolina Bescansa. Desde Podemos aseguraron que harán “acto de presencia por responsabilidad institucional”, pero consideran que “no tiene por qué ser el secretario general o el secretario político” quienes vayan al acto.