GASTEIZ. En su intervención en la primera sesión del pleno de investidura del lehendakari, Mendia ha defendido el acuerdo que su partido ha firmado con el PNV para gobernar juntos Euskadi durante los próximos cuatro años.

Ha reconocido que la suma de socialistas y nacionalistas no llega a la mayoría absoluta, pero ha rechazado que sea un pacto "cojo" o "insuficiente" y ha enumerado en este sentido todos los gobiernos vascos en minoría que ha habido desde la Transición y que han ocupado "la mayor parte de la historia democrática de Euskadi".

Ha abogado en todo caso por ganarse la confianza de los grupos de la oposición para que éstos participen de las iniciativas del Ejecutivo y se evite así el "riesgo" de que planteen "propuestas de mero bloqueo".

Mendia ha explicado que el acuerdo de gobierno no satisface de manera "plena" ni al PNV ni al PSE, pero que estos partidos han decidido "comprometerse con soluciones para los ciudadanos nacionalistas y no nacionalistas" y ofrecer "estabilidad y certidumbre" para "construir un país juntos".

"Abrimos una nueva etapa de diálogo en Euskadi y queremos sumar a todos los que busquen ese objetivo compartido", ha proclamado la líder socialista, quien ha asegurado que compartir Ejecutivo con el PNV supone "un esfuerzo suplementario de lealtad", pero es también una "garantía añadida" de que el programa de gobierno se cumplirá.

Mendia ha desgranado los ejes de ese acuerdo: mantenimiento de los servicios públicos, el impulso a la economía y a la generación de empleo de calidad, la mejora del autogobierno y el asentamiento de la convivencia.

Sobre el autogobierno, ha dicho que los vascos respaldan "ampliamente" la necesidad de actualizar el autogobierno, aunque ésta "no es una de sus urgencias". Esa profundización del autogobierno, ha advertido, "debe ser una tarea de todos" los grupos del Parlamento y debe establecer "cauces seguros" para evitar que la acción de Gobierno "esté permanentemente paralizada por recursos".

En materia de convivencia Mendia ha advertido de que hay "un paso previo e imprescindible: la disolución de ETA" y de que es necesario compartir que "no hubo razón política ni de Estado" para justificar las vulneraciones de derechos, ya fuera a manos de ETA o de otros grupos terroristas, ni tampoco los abusos policiales.

La acción del futuro Gobierno Vasco abordará también cuestiones como el envejecimiento de la sociedad, la plena incorporación de la mujer a la economía, la "extensión" del derecho a la vivienda, la reducción de la siniestralidad laboral, el impulso al diálogo social, la apuesta por la investigación y la innovación, y la lucha contra el cambio climático, la violencia machista y la pobreza energética.

Para estos "inmensos retos", ha recalcado la líder de los socialistas de Euskadi, es necesario "dialogar con el resto siempre".