bilbao - Pase lo que pase hoy en el Comité Federal, la diputada de PSOE Margarita Robles anuncia que por coherencia y compromiso con los votantes socialistas votará no a Rajoy

El giro del PSOE parece ya un hecho, ¿Qué espera del Comité Federal que se celebra hoy?

-Me gustaría que hubiera un debate serio y con mucha reflexión y que al final saliera el no a Rajoy. Primero por coherencia con lo que el PSOE viene manteniendo, y además por unanimidad, y segundo porque creo que no es bueno para España otros cinco años de un Gobierno de Rajoy, que lo único que ha traído son más desigualdades y restricciones de derechos y libertades.

¿Qué razón expuso el presidente de la gestora, Javier Fernández, ante el Grupo Socialista para explicar ese giro del no a la abstención?

-Curiosamente parece que nadie quiere nombrar la palabra abstención. Es muy difícil encontrar a miembros de la gestora o incluso algunos de los barones que estaban contra Pedro Sánchez hablar de abstención. Se habla, de una manera eufemística, de terceras elecciones. Lo que me gustaría es que si están tan convencidos de que en el fondo la abstención es buena, que lo hablaran con toda claridad. Lo que sí tengo claro es que en este momento hay un divorcio entre los dirigentes del PSOE y la inmensa mayoría de los militantes, que clarísimamente se han posicionando por el no a Rajoy.

En la reunión del Grupo Socialista solo hubo tres voces que apoyaron el no a Rajoy, entre ellas la suya. ¿Dónde estaban los diputados ahora estaban alineados con el no?

-No lo sé. Tendrán que explicarlo ellos. No es coherente que el 30 de agosto el PSOE vote no y que la posición sea no, y ahora, tras lo ocurrido en el Comité Federal que llevó a la dimisión de Sánchez, se cambie el criterio. Creo que en política, como en la vida, hay que tener coherencia y si uno cambia así de criterio es porque tiene razones muy fundadas. Cuando un partido se presenta a unas elecciones, se presenta con un programa y ese programa es una especie de contrato que le obliga y le vincula con sus votantes. El PSOE se presentó con un programa que era muy claro, que decía sí al cambio, y ese sí al cambio implica evidentemente un no a Rajoy. Tuvo más de cinco millones de votos. Los votantes que confiaron en el PSOE para cambiar el gobierno de Mariano Rajoy necesitan una explicación y yo, la verdad, y con el mayor respeto a todo el mundo, tengo que decir que no he oído una explicación lo suficientemente convincente como para justificar ese cambio de posición. Además, tampoco entiendo a los que dicen que abstener no es apoyar. Abstenerse es permitir que continúe Rajoy y sus políticas.

Se habla de abstención técnica a incluso de abstención ‘urinaria’. ¿Eso es engañarse?

-Como estoy por el no, no puedo entrar a valorar la abstención. Sin embargo, entiendo para aquellos que mantienen la abstención, sea más lógico una abstención de once diputados, que de todo el grupo parlamentario. Entiendo que en el PSOE la inmensa mayoría de sus militante está por el no y de esa manera, y aunque sea vergonzante, esa brecha o divorcio, podía ser menor.

¿Si se ordena una abstención en bloque? ¿Usted entregaría su acta?

-La Constitución española es muy clara. Los disputados son libres en su posicionamiento y el escaño pertenece a los diputados. Y si yo voy a votar no es precisamente porque soy coherente y porque defiendo el proyecto del PSOE con el que se presentó a los comicios. Así, entiendo que no hay ninguna razón para dejar el acta de diputado. Ademas, en el siglo XXI conceptos como el de disciplina de partido o de voto están un poco pasados de moda. En otros países no existen y se hace un llamamiento a la responsabilidad de los disputados. Quiero decir que mi posición es desde la responsabilidad.

¿Se le ha pasado por la cabeza dejar el Grupo Socialista e integrarse en el Grupo Mixto?

-No, para nada. Tengo un compromiso con los cinco millones de personas que votaron al PSOE. Con mi posición a favor del no estoy siendo leal con todos esos militantes. Voy a votar no a Mariano Rajoy, pero no pienso entregar mi acta, ni pasarme al Grupo Mixto del Congreso.

Habla repetidamente de la militancia del PSOE. ¿Por qué no se ha consultado a las bases ?

-Repito que no soy militante del PSOE y por tanto prefiero ser prudente sobre las cuestiones internas. Pero pienso que cuanta mayor participación se dé en la toma de decisiones, es muchísimo mejor. Si Pedro Sánchez fue elegido por la militancia creo que debe ser la militancia la que se posicionara. El aparato tendría que pensar si no se está produciendo un divorcio con la militancia socialista.

¿Qué cree que hará Pedro Sánchez en la sesión de investidura?

-Es una decisión personal, pero estoy convencida de que Pedro Sánchez, en ningún caso, se va a abstener. Las otras variables no me corresponden a mi decirlas, pero yo estoy convencida de que, por coherencia con lo que ha defendido, no se va abstener.

Sigue pendiente el Congreso del PSOE. ¿Cree que Pedro Sánchez tendría opciones de volver a salir elegido secretario general?

-Es una decisión suya. Lo que sí puedo decir, por lo que palpo, por lo que siento y por lo que me dicen, es que este momento la inmensa mayoría de la militancia está con él. Y está con él porque entienden que ha sido coherente y fiel a sus principios.

En los últimos días ha sido noticia la protesta a Felipe González en la Universidad. Se habla de él como el ideólogo del golpe del mano en el PSOE. ¿Tanta fuerza tienen el ex secretario general?

-Creo que ha habido una actuación que muchos califican de golpe palaciego. A mí me parece que lo pasó en el Comité Federal es un ejemplo clarísimo de lo que en ningún caso debe suceder.

¿Considera que algunos dirigentes del PSOE no están siendos honestos? Y me refiero a Susana Díaz, que parece maniobrar en la sombra.

-No sé lo que está en la mente de esas personas. Lo que sí me sorprende es que, por ejemplo, haya algunos que no se atrevan a hablar claramente de cuál es su postura. Lo primordial es la sinceridad y la transparencia y no sé si en este momento se está haciendo un ejercicio de transparencia. Prefiero una persona con la que no comparta sus ideas, pero que sea sincera, que no alguien que en cualquier momento pueda cambiar de opinión.

¿Rajoy es el gran triunfador de todo este barullo interno en el PSOE? -Hay que reconocer que ha gestionado esta situación con mucha habilidad en su propio beneficio y lo que ha hecho es conseguir seguir gobernando en la próxima legislatura y, además, y si se me permite la expresión, humillar al PSOE.

Desde diversos sectores del PSOE se habla de que será una legislatura corta. ¿Usted que vaticina?

-Creo que va a ser una legislatura larga. Rajoy va a tratar de estirarla.

¿Y cuál ha sido el papel de Podemos? La formación morada se autodefine ya como principal fuerza de la oposición.

-Soy muy crítica con Podemos. Si ahora estamos así es porque cuando hubo la oportunidad de un gobierno del cambio protagonizado por Sánchez y el PSOE, Podemos no apoyó ese gobierno del cambio. Es algo que no puedo olvidar porque si vamos a tener un gobierno de Rajoy es porque en el mes de marzo Podemos no tuvo ni la generosidad ni la valentía de apoyar ese gobierno del cambio.