gasteiz - Arnaldo Otegi intenta rebajar la presión que ha recaído sobre su persona en los últimos días y sostiene que su futuro no está en juego en la cita electoral del 25-S. El candidato de EH Bildu a lehendakari aseguró ayer que, aunque muchos pretenden que los comicios autonómicos “se conviertan” en una cuestión de “vida o muerte”, no suponen una amenaza para su “posición política” y su porvenir en la coalición abertzale, en caso de obtener unos resultados negativos. “No aspiro a hacer carrera política. Siempre he dicho que no soy un político, soy un militante que voy a dar lo mejor de mí mismo en estos comicios”, aseguró.

“No sé si existe el efecto Otegi, lo veremos el 25 de septiembre”, señaló en una entrevista con Efe el dirigente abertzale, quien no obstante considera que, “en vista de cómo reacciona el Estado” frente a su candidatura, “algún miedo debe de tener”. En ese sentido, añadió que, cuando observa “esa especial agresividad, inquina y esa permanente obsesión” por impedir que concurra a las elecciones, piensa que debe estar haciendo una buena labor “para que la derecha española esté respondiendo de esa manera”.

De cualquier manera, Arnaldo Otegi reiteró que, aunque se trata de una convocatoria electoral “muy importante”, su futuro no dependerá del resultado, ya que en anteriores ocasiones ha estado en el Parlamento Vasco “con siete parlamentarios y con catorce”, mientras que ahora está “absolutamente seguro” de que obtendrá “bastante más”. “A algunos les gustará más y a otros menos, pero estoy convencido de que vamos a tener un magnífico resultado electoral”, defendió.

Respecto a su posible inhabilitación, que se ha convertido en el principal toma y daca político de las últimas semanas, el secretario general de Sortu se muestra “absolutamente convencido” de que le asiste la “razón jurídica”, porque hay un precedente en su misma formación. Se trata del caso de Iker Casanova, quien fue elegido parlamentario vasco por la coalición abertzale pese a estar inhabilitado por los tribunales. “Para que a mí se me pueda inhabilitar se tiene que hacer trampa y saltarse toda la jurisprudencia del Tribunal Supremo, del Tribunal Constitucional y de la Audiencia Nacional”, expresó Otegi, que tiene total confianza en que será el “candidato de EH Bildu hasta el final”, pese a que para algunos esto pueda suponer “una provocación”.

“Nosotros somos soberanistas, independentistas y gente de izquierdas. Hemos decidido que yo sea el candidato y no aceptamos en términos políticos que haya una instancia ajena a este país que decida si nos podemos presentar o no”, argumentó el dirigente de Sortu, antes de insistir en que, si finalmente se produce su inhabilitación, seguirá con su “programa y actividad con absoluta normalidad”.

legislatura favorable Arnaldo Otegi opina que los próximos cuatros años van a ser muy relevantes para Euskadi, ya que, la relación de fuerzas en el nuevo Parlamento Vasco “va a ser favorable en términos nacionales al derecho a decidir y en términos sociales a recuperar el estado de bienestar”. Así, espera que sea factible llegar a acuerdos con Podemos y el PNV en estos ámbitos para lograr “grandes acuerdos de país”.

El candidato de EH Bildu se refirió también a la entrega de armas por parte de ETA y a la situación de los presos de la organización, unos “debates” que, a su parecer, deben experimentar “una cierta aceleración en los próximos meses y años”, porque “este país no puede seguir soportando las consecuencias de una etapa anterior”. Tras afirmar que la convivencia ya está “bastante normalizada” en Euskadi, Otegi mantuvo que faltan por resolver asuntos como “la memoria, el tema de los presos y el desarme de ETA”, cuestiones en las que su formación se va “a comprometer” para que se resuelvan “de forma razonable” en este período.