DONOSTIA. En declaraciones a los medios en Donostia, el portavoz de Etxerat Urtzi Errazkin ha explicado que esta iniciativa, que realizan cada verano, es "una llamada de atención sobre una situación que amenaza con prolongarse indefinidamente, prolongando también el sufrimiento".

En este sentido, ha señalado que "no podemos acostumbrarnos a las vulneraciones de derechos, ni podemos permitir que se perpetúe el sufrimiento". "Esa llamada de atención la vemos este año más necesaria que nunca", ha destacado.

En este sentido, ha recordado que el pasado lunes el lehendakari, Iñigo Urkullu, rechazó, por primera vez, recoger el informe de Etxerat "sobre las consecuencias de la política de dispersión sobre un sector de la sociedad vasca, el más vulnerable, los niños y menores de edad" en Azpeitia, donde familiares y allegados de presos se concentraron coincidiendo con las fiestas de San Ignacio.

"Lo que cerca de mil niños y menores de edad se ven obligados a sufrir por una política penitenciaria de excepción con fines políticos al lehendakari no le ha interesado", ha denunciado Errazkin.

A su juicio, el de Urkullu ha sido "un gesto cuidadosamente calculado", para "escenificar así su desinterés y con esto un paso atrás en su posición con respecto a la política de dispersión, sus consecuencias y hacia los ciudadanos vascos que la sufren".

El portavoz de Etxerat ha denunciado que la del lehendakari es "una actitud lamentable", dada su "responsabilidad ineludible para con los derechos humanos". "Estamos seguros de que a pesar de actitudes como la del lehendakari, la sociedad vasca conseguirá desactivar la política de dispersión y de que un día se conocerán sus consecuencias y los responsables de su activación y mantenimiento no podrán seguir escondiendo el sufrimiento que han causado", ha finalizado.