Donostia. Una decena de encapuchados abordó a las 21.50 horas de ayer un autobús de la línea 5 en la capital guipuzcoana, que une el Boulevard donostiarra y Benta Berri, para denunciar el aislamiento al que han sido sometidos varios presos de ETA en la prisión gala de Fresnes, que llevan 16 días en huelga de hambre.
El incidente, que duró unos tres minutos, consistió en detener la marcha del vehículo en la calle Matia y sin bajar a los pasajeros, varios encapuchados que vestían buzos blancos se subieron al techo con la ayuda de una escalera de mano y desplegaron una pancarta con el lema Fresnes. Isolamendurik ez! mientras encendían bengalas rojas. Tras realizar varias pintadas en el vehículo, los encapuchados huyeron mientras el autobús continuó su marcha. - DNA